Y la Ruta llegó al Tayrona

Tres días en uno de los paraísos de Colombia, el Parque Natural del Tayrona, nos han sabido a muy poco, sobre todo a los expedicionarios que por fin han podido disfrutar de las aguas calentitas del Mar Caribe.

Montamos nuestro campamento en la orilla del mar, en un paraje de ensueño donde la noche nos permitió disfrutar de las estrellas de una forma especial, al calor de las experiencias ruteras. Pero el despertador sonó pronto. A las 5 los titiriteros ponían en marcha el tambor y la dulzaina para despertar a los expedicionarios… ¡¡El día ha comenzado!! Con las mochilas al hombro, emprendieron una nueva aventura de más de 20 kilómetros a través de la selva y las costas del parque natural para llegar a “Pueblito”. Caídas, torceduras, calor, humedad… ¡¡Nada impidió a los expedicionarios terminar!! La recompensa era grande, el baño que tanto estaban esperando… Llevaban horas viendo el mar, horas esperando el momento de correr hacia él y al final llegó. Tras 8 horas de marcha, corrieron hacia el mar para refrescarse antes de comenzar las 3h que les quedaban por delante para volver a sus tiendas de campaña.

La vuelta se transformó en una auténtica aventura, la noche se nos echó encima y tuvimos que recorrer más de la mitad de la ruta completamente a oscuras sólo acompañados de los ruidos nocturnos de la selva.

Pero al final llegamos y lo hicimos preparados para emprender una nueva aventura, esta vez en la ciudad de Santa Marta, dónde buscaremos los lugares que no podéis perderos acompañados de los expedicionarios como ya hicimos en Cartagena de Indias