Especial
“Que cada uno hable lo que quiera que yo voy a seguir haciendo mi vida”
Vanesa Martín da carpetazo al asunto Inma Cuesta y nos habla de su debut literario con amor, sexo, denuncia social, feminismo y pasión, mucha pasión
Vanesa Martín es una de esas mujeres que no acaban de recibir el gran reconocimiento del público que todavía no la ha convertido en diva del momento pero, que, sin embargo, posee el cariño y respeto de sus colegas de profesión y de la gente que ha querido acercarse a ella a través de su música y, sobre todo, de sus letras. Por eso la hemos visto compartir escenario con gente tan dispar como Alejandro Sanz, Pablo Alborán o India Martínez.
Malagueña de nacimiento y de sentimiento acabó viniéndose a Madrid para encontrar su oportunidad. Su esfuerzo y constancia están empezando a recoger sus frutos y vive uno de sus momentos más dulces. “Me siento afortunada porque vivo de lo que quiero vivir y como quiero vivir”, confiesa. Y eso es gracias a la música, aunque no exclusivamente.
Se define como una mujer inquieta y valiente a la que le gusta probar cosas nuevas. “A veces les digo a mis amigos que me dejen ir a su oficina a trabajar un día para descubrir qué se siente y aprender cosas nuevas”, cuenta. Pero no le ha hecho falta, ha descubierto nuevos mundos desde su lado más creativo.
Ha puesto música a La novia, una de las protagonistas de la última edición de los Goya. Ha sido asesora en La Voz kids y, por si fuera poco, acaba de publicar su primer libro de poemas que antes de salir a la calle ya tenía vendida su primera edición. Ahora está ya en los primeros puestos de la literatura más vendida en nuestro país. Mujer océano es todo un éxito.
Lo ha podido comprobar en las firmas de libros. “Estoy firmando una media de 700 personas y eso es una locura”, explica emocionada, “es muy gracioso, viene gente con su página señalada para que firme ahí. No es como cuando sacas un disco que la gente coincide en las mismas canciones, aquí cada uno viene con una página diferente”.
Esta nueva experiencia le está descubriendo otro mundo que le gusta, “tiene muchas similitudes con la música, por supuesto, pero me hace gracia descubrir que hay vida después de la música”, asegura.
Pese a todo, todavía manda el cotilleo y últimamente se ha hablado mucho de su relación con Inma Cuesta de la que ella tan solo explica que es vecina y muy buena amiga. De ella, de Pablo Alborán, de amor, sexo, feminismo, refugiados, situación política y, por supuesto, música, hemos hablado con ella. Nos hubiera gustado hacerlo abriendo una botella de vino pero su completa agenda no da para tanto, será en otra ocasión.
Uno de tus versos dice: “Nadie desnuda su alma sin atisbo de miedo”, ¿cuáles han sido los mayores miedos que has sentido escribiendo este libro?
La responsabilidad. Desde muy pequeñita he escrito canciones pero escribir un libro de este tipo es una disciplina completamente diferente, es algo nuevo para mí. No hay música tras la que escudarse sino que el peso del mensaje recae exclusivamente sobre la palabra. Sentí, no miedo, pero sí mucho pudor cuando me lo ofrecieron y de ahí mi negativa. Al principio me negué pero insistieron y al final me alegro de que lograran convencerme porque está siendo un viaje muy bonito.
La acogida ha sido fantástica, algo que no todo el mundo podía esperar de un poemario. Nos guste o no todavía sigue siendo un género que asusta, ¿no crees?
Yo creo que de un tiempo a esta parte hay una oleada de lo que se viene llamando poesía urbana que es una poesía que usa un lenguaje bastante cercano y bastante de a pie, sin llegar a ser vulgar, por supuesto, pero sí que, muy accesible.
En el libro hay mucho amor y desamor. Antagónicos pero con algo en común…la intensidad y la pasión, ¿no es cansado vivir, todo, tan a flor de piel?
En el libro hay amor, desamor, una crítica a la hipocresía social, una lucha por la igualdad del ser humano, la necesidad de un mundo mejor y más justo para todos, amor a la naturaleza, a los animales, a todo lo que nos envuelve. Yo soy muy pasional para todo. Te puedo ir de un extremo a otro de la conversación y cuando algo me mueve y me pellizca siento esa fuerza y esa pasión con la que defenderme.
¿Te consideras valiente en el amor?
Sí, bastante, vaya, yo creo que sí, cada uno se creerá lo que quiera. Hay que tirarse a la piscina y atreverse que la vida es breve.
Pasión pero no posesión, ¿en contra de hablar de dueños en una relación?
Las inseguridades de cada uno, que se las gestione cada uno.
Nada de posesión, pero absolutamente nada. Creo que hay que ser generoso y las inseguridades de cada uno que se las gestione cada uno pero que no las vuelque en nadie.
Dejas muchas pinceladas de romanticismo, ¿te consideras romántica?
(risas) un poquito quizás, un poquito, pero nada cursi.
No es necesario ser cursi para ser romántico…
Ya, pero ¿sabes lo que pasa? Escribes un libro de poesía, de repente, la primera entrevista que hice me dijeron que la poesía es de chicas y me dio mucho coraje. Hay público tan diferente.
También hay una buena dosis de sexo, ¿lo concibes sin amor?
El sexo sin amor, ¿por qué no? ... Es un deporte maravilloso.
El sexo sin amor, ¿por qué no? Cada uno que haga lo que quiere, es un deporte maravilloso.
También hay en el libro amores de un día, ¿cuesta recordarlos?
El poema te cuenta una noche, a lo mejor luego hubo más noches (risas).
‘Te quiero cuando’…. ¿Un homenaje a las pequeñas cosas de la cotidianeidad?
- Te quiero cuando... (fragmento)
Los pequeños detalles son los que te alegran el día. Ahora mismo estoy en un momento de mi vida en el que el aquí y ahora es lo que más me preocupa y el mañana ya vendrá. El aquí y ahora es lo único que tenemos como realidad y es lo único de lo que tenemos que preocuparnos. Lo demás es tan impredecible.
Ya, pero es que tu aquí y ahora es muy bonito, así es más fácil.
Estoy en un momento bonito y muy intenso, también. Aunque quisiera no tener un aquí y ahora era imposible porque mentalmente como no esté en el aquí y ahora me he perdido ya. Es un momento bonito y por suerte mi familia está bien y está conmigo, y mis amigos y mis perros y estoy disfrutando de la generosidad de la vida.
También escribes: “Soñar es obligado y sentir inevitable”. Eres una idealista empedernida, ¿no?
¿Y yo que hago? He nacido así y para qué voy a cambiar, tampoco es malo.
No, pero a veces te llevas buenos golpes cuando chocas con la realidad.
Ya, pero confío en eso y confío y navego y nado a favor de esa corriente. Me hace mucho más feliz que si no lo hiciera.
También hay amor de hija, ¿cómo ha recibido tu madre su poema?
- Joven mujer de ojos azules (fragmento)
Muy bien, está muy orgullosa.
¿Se reconoce y te reconoce?
Sí, lo que pasa es que como en mi casa somos muy guasones hay momento cachondeo con lo de ‘vámonos al mar’. Entre mis hermanos y mi padre y todo. Yo agradezco que mis padres sean así porque no te dejan que se te levanten ni medio palmo los pies del suelo y eso es maravilloso.
Vaya, que le ha gustado.
Mi madre dice que ha llorado tres veces leyéndolo porque no se lo esperaba ni lo sabía. Lo descubrió hace tres días. Me llamó por la noche y me dijo, niña, si la página 119 es para mí.
¡No le dijiste nada!
No, quería que se llevara la sorpresa, me gustan muchas las sorpresas. Cuando llegué a casa después de la firma del libro imagínate la bromita de mi hermano… (risas).
Si ahora escribieras un poema del presente, ¿sería de amor o desamor?
Ahora mismo sería de realidad total y absoluta. No sé si de amor o desamor porque yo estoy enamorada de la vida completamente desde que me levanto hasta que me acuesto. Encima ahora que están pasando cosas tan bonitas con el libro, que me dieron el disco de oro por el dvd en vivo hace una semana. Haría un poema de gente cruzando por un paso de peatones, cada uno su historia, cada uno su realidad en la cabeza, sus inquietudes y el amor escondido detrás de cada sombrilla de cafetería.
También hay denuncia social: ‘Cuántas fronteras nos caben en la boca’.
Para mí es uno de los más relevantes del libro. El niño que amaneció en la playa, esa imagen aterradora fue el detonante y la sensación de que muchas veces hay quien gira la cabeza ante eso y no se puede girar la cabeza.
¿Qué haces tú?, porque a veces no es fácil saber cómo actuar.
- CUÁNTAS FRONTERAS NOS CABEN EN LA BOCA (fragmento)
No conformarnos es algo bastante interesante, y pelear. El momento político de nuestro país está denotando que estamos vivos, que están pasando cosas, que no nos conformarnos y que no queremos que la situación siga como hasta ahora. Eso es una opción valiente que tenemos todos, el compromiso de pelear y no conformarnos y luchar por aquello que nos parece más justo y ser generosos con otra gente cuando otra gente lo ha sido con nosotros también.
Hablas de la situación actual, un tanto caótica ¿no?
Como decía Einstein, toda crisis antecede a un cambio positivo y yo creo que el cambio positivo va a suceder. Yo confío.
¿Reivindicación feminista? Lo digo por el título y el día de lanzamiento (8 de marzo).
Reivindicación de la mujer creo que de una manera igualitaria. Cuando me dicen a veces ‘te revelas como feminista y tal’ yo creo que el papel de la mujer, independientemente de que somos realistas y sabemos que nos queda alguna batalla que ganar, parto de una igualdad. No me sitúo en ningún escalón por debajo, me sitúo a la misma altura de los ojos del que tengo enfrente. Hablo de la mujer emprendedora, de la mujer valiente, de la mujer creativa, esa fuerza, esa mujer amante de todo lo suyo, de esa potencia que tiene cuando un ser es capaz de engendrar una vida y me apetece hacer ese pequeño homenaje.
Parece que hay una nueva oleada de este reivindicar igualitario al que se han sumado celebs como Emma Watson o Jennifer Lawrence.
Me alegra que sea así. En los Oscar todos hablan del modelo de ellas y de ellos no se dice nada. Hay que estar ahí y si por suerte tenemos un medio de comunicación, un papel escrito o algo con lo que podamos dar difusión, hay que hacerlo.
En la presentación de tu libro estuvieron contigo, además de Silvia Abascal, Inma Cuesta y Álex García. Todos habéis participado en La novia ¿La peli os ha unido mucho o venía ya de antes?
La novia ha sido una peli que nos ha unido mucho, se han vivido momentos de… una película de tan poquísimo presupuesto, tantas dificultades a la hora de rodar y cómo nos hemos volcado todos ahí, yo con mi pequeña participación de la música y ellos con sus papeles protagonistas, cada uno en su dimensión, pero cómo nos hemos volcado todos, ha hecho que sea un proyecto muy bonito. Pero la amistad venía de antes. Álex había participado en el vídeo de Polvo de mariposas por la amistad que nos une. A Inma la conozco de hace bastante tiempo y Silvia Abascal es un amor y los tres, junto a otros amigos, hemos hecho una buena piña y nos lo pasamos muy bien.
Participaste con la adaptación de una canción. ¿Qué tal la experiencia cinematográfica?
Cuando me lo propusieron, la verdad es que… como era una adaptación de una canción rarísima, sefardí dije ‘yo esto no lo hago, esto es rarísimo, ¿cómo le doy yo forma a esto?’. Pero después me enamoré del proyecto por todos ellos, los que estaban participando, y por Lorca, y Bodas de sangre y mira…ahora es una canción, me enteré hace poco, que la usan en todas las bodas.
Se llevó el Goya Pablo Alborán que también debutaba en estas lides, ¿le felicitaste?
Yo a Pablo lo adoro, lo quiero, lo amo, desde antes de que sacara su primer disco, nos llevamos muy bien, tenemos mucho contacto, además, y le felicité allí mismo.
Vamos, que lo vuestro viene de largo.
Sí, él venía a verme a algunos conciertos y quedábamos en Málaga, somos los dos de Málaga. Y antes de irme, en los Goya, busqué un momentito para felicitarle.
Por cierto que él no ha escrito un libro pero sí han escrito un libro con él de protagonista, una fan fiction en la que se enamora de una fan, ¿cómo llevarías que hicieran algo parecido contigo?
No tengo ni idea, no lo conozco. No lo sé, cuando lo hagan, si lo hacen, ya veré.
Volviendo a lo de Inma Cuesta y vuestra amistad que ha llenado portadas, ¿te ha sorprendido el interés que se ha generado en torno a vuestra relación?
Estoy bastante cansada, llega un momento en el que ya no hablo absolutamente nada, nunca he hablado de mi vida y no lo voy a hacer ahora. Me parece un tema obsoleto y que cada uno hable lo que quiera que yo voy a seguir haciendo mi vida como buenamente me apetezca.
Por cierto que Inma ha demostrado en más de una ocasión que podría cantar si quisiera, ¿alguna vez os habéis planteado una colaboración musical?
Ella canta, no bien, sino super bien. En Ay Carmela compuse una canción para el musical, y ella la cantó, ahí está nuestra colaboración.
Pero, ¿la escucharemos en tu nuevo disco?
Todavía estamos en fase primaria y no me he planteado nada con nadie. Cuando llegue el momento de empezar con el disco ya de lleno, veremos. Entro en mayo en el estudio y si yo te contara cuándo elijo las colaboraciones de mis discos y mis conciertos… en el último momento.
¿Escucharemos alguno de estos poemas musicado?
Puede ser, ya he jugado con alguna letra que quiero que me acompañe con música.
Tu paso por La Voz Kids te abrió las puertas a un público que hasta entonces puede que no hubiera escuchado tu música, ¿cómo viviste esa experiencia?
Me lo pasé muy bien con mis compañeros, con Manuel, que le adoro, con Bisbal que es maravilloso, con Rosario, con Pastora que es gran amiga mía, con Pablo López, malagueño también. Lo pasé muy bien y lo sufrí también porque me dio mucha cosita cuando ves a esos niños con esa ilusión, con tantas ganas, tanta inocencia y llega el momento de ir eliminando. No pensé que lo fuera a pasar tan mal.
Has estudiado Magisterio, ¿algo de preparación llevarías para tratar con niños?
Para eso no terminas de prepararte porque cada niño es capaz de sorprenderte. Me llamó la atención la seguridad con la que salían al escenario y el compañerismo entre ellos y la ilusión con que lo vivían todo. En todo momento les hacía mucho hincapié en que es un juego, una experiencia que no se pueden tomar como que su vida va a depender de ello.
¿Qué te ha dicho Manuel Carrasco de tu libro?
Se lo he mandado, cuando le llegue…a ver.
Además de a Manuel, si pudieras regalar ahora mismo tu libro a alguien, ¿a quién te gustaría dárselo?
A mucha gente aunque ahora mismo me encantaría que mi libro pudiera llegar a mi abuela… y a alguien que viva, me encantaría que lo tuviera Adele.
Y si pudieras escribirle ahora a alguien una canción, que lo has hecho mucho, ¿para quién sería?
Para Luz, me encantaría.
Leyendo tus poemas descubrimos que te gusta compartir una buena botella de vino, ¿con quién te gustaría abrir una?
Ahora mismo con toda mi familia y todos mis amigos que tenemos una celebración pendiente por el libro, el disco de oro, el fin de gira y ahí es mi próxima cita con una buena botella de vino.
Algún proyecto con la que vayas a sorprendernos.
El disco se va a llevar todo mi tiempo. Son cuatro discos de estudio. Este último me ha hecho crecer muchísimo y me apetece centrar 100% todos mis sentidos ahí, hacerlo con calma, probar algún sonido que tengo en la cabeza, el equipo es nuevo, y me apetece sumergirme ahí.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...