En el sector moda también caen los ‘intocables’

Sin duda, cuando repasemos la historia tendremos que hablar de un antes y un después del caso Harvey Weinstein. Desvelar los abusos de uno de los hombres más poderosos de Hollywood ha abierto una nueva era en la que el acoso laboral empieza a ser demonizado como se merece.

Y no solo hablamos de cine, otros sectores, como el de la moda, también están sufriendo tiempos convulsos en este sentido. El grupo Condé Nast, que aglutina cabeceras como Vogue, Smoda o Glamour, se ha puesto serio y quiere poner freno a esta situación.

Primero anunció que dejaba de trabajar con Terry Richardson y ahora, la editora de Vogue ha anunciado que, hasta que se aclaren las acusaciones que más de una veintena de modelos masculinos han vertido sobre Mario Testino y Bruce Weber, dejarán de trabajar con ellos.

Ambos son dos de los fotógrafos más prestigiosos de la moda y raro es el que no ha pasado por sus manos. Famosa es la serie de la toalla blanca de Testino que tiene entre sus musas a Selena Gomez, Gigi Hadid, Justin Bieber, Cameron Dallas o Miley Cyrus entre muchísimos otros.

“El abuso de poder se ha extendido por demasiado tiempo en muchos ámbitos, incluidos Washington, Hollywood, la prensa, Silicon Valley y, por último pero no por ello menos importante, en el mundo de la moda. Muchas mujeres y hombres jóvenes han hablado de la manipulación y coerción en audiciones, sesiones fotográficas y otros ambientes de trabajo”, escribía Anna Wintour, editora de Vogue.

En su empresa se han elaborado una serie de medidas para intentar acabar con esta lacra. “Nos ponemos de pie con las víctimas de abuso y malas conductas, pero también tomamos el espejo para mirarnos a nosotros mismos y preguntarnos si estamos haciendo todo lo que podemos para proteger a aquellos que trabajan con nosotros para que hechos inaceptables no pasen delante de nuestros ojos”, continuaba en su comunicado.

Testino y Weber han sido acusados de comportamientos inadecuados que han llegado al nivel de tocamientos e, incluso, masturbaciones. Un tema que toca especialmente a Wintour que es amiga personal de estos dos fotógrafos.

“Hoy han aparecido acusaciones contra Bruce Weber y Mario Testino, historias que han sido difíciles de escuchar y desgarradoras de afrontar. Ambos son amigos personales míos y han sido contribuidores extraordinarios de Vogue y otras publicaciones de Condé Nast”, escribía, “ambos han emitido objeciones o negaciones sobre lo publicado. Creo firmemente en el valor del remordimiento y el perdón, pero tomo estas acusaciones muy seriamente, por lo que en Condé Nast hemos decidido poner en espera nuestro trabajo con estos fotógrafos por el momento”.