Blue Ivy (la hija de Beyoncé y Jay Z) demuestra, en los Grammy, quién manda en casa

Y se convierte en la reina de la noche

Ni Bruno Mars ni Kendrick Lamar, la gran protagonista de la noche de los Grammy 2018 ha sido una mujer. O más bien, una niña. Blue Ivy, la hija de Beyoncé y Jay Z ha brillado en una noche nefasta para su padre.

Jay Z partía como favorito con 8 candidaturas pero acabó la noche sin ninguna estatuilla. Un fracaso que vivió acompañado de las mujeres de su vida. Y, tras la gala y ver el comportamiento de cada uno de ellos, quedó claro quién manda en la familia.

La pequeña fue la encargada de ir marcando los tiempos y si sus padres se pasaban en los aplausos en medio del discurso pro ‘dreamers’ de Camila Cabello, a ella le tocaba llamar a la calma.

Sin duda, la imagen de ella pidiendo a sus padres que dejaran de aplaudir para poder seguir escuchando el discurso, será una de las más comentadas de unos Grammy sin grandes momentazos virales.

Esa calma, serenidad y autoridad dejan claro que, pese a sus sólo 6 años, Blue Ivy tiene las cosas muy claros e iniciativa suficiente como para ser la encargada de ponerle a su padre la rosa blanca en la solapa como apoyo al movimiento #Time’sUp contra el acoso sexual.

Blue Ivy le coloca a su padre la rosa blanca contra el acoso sexual. / GettyImages

La niña tiene un algo que hace que hasta Alicia Keys se arrodille ante ella. Sin duda, debió ser el gran consuelo para su padre que vio cómo su rival, Kendrick Lamar, se alzó con 5 estatuillas mientras que su nombre no sonó en ningún momento.

Ni Beyoncé, ni Jay Z, a Alicia Keys le interesa Blue Ivy. / GettyImages

Cristina Zavala

Periodista enamorada de todo el entretenimiento....