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'The Game': cuando Queen se rindió a los sintetizadores
El octavo álbum de la banda salió de la nada para tomar el mundo por asalto y catapultarlos a un entorno completamente nuevo
Fue el octavo álbum de estudio de Queen, y uno de los más exitosos a escala internacional. Se grabó en dos bloques. Durante las sesiones iniciales de junio y julio de 1979, en los Musicland Studios de Múnich, la banda trabajó en cuatro piezas incluyendo Crazy Little Thing Called Love. Esta aparecería en octubre como el primer single, siete meses antes que The Game. Las otras sesiones, también en Musicland, fueron grabadas entre febrero y mayo del año siguiente.
A pesar de que Queen había comprado recientemente unos estudios de grabación propios en Montreux, Suiza, no los utilizó para este proyecto. Todos los temas fueron grabados en Múnich. The Game marcó un gran punto de inflexión para Queen en cuanto al estilo musical. Por primera vez la banda experimentó con ritmos disco/funk, se sumergió completamente en los ritmos marcados por el bajo típicos de aquel tiempo. Fuera lo que fuera que hiciera Queen, fuera cual fuera el resultado, bueno o malo, lo asumían por completo, y este álbum no fue ninguna excepción.
The Game resultó el primer álbum de Queen que incluía sintetizador, aunque este aspecto no fue demasiado apreciado por muchos seguidores veteranos de la banda que la habían acompañado en los días de rock más duro de los 70, en los que nadie tocaba el sintetizador. Se sabe que a John, concretamente, le gustaba la música negra animada y llena de sentimiento, así como la música disco/dance, y era el miembro de la banda que parecía más a gusto con este significativo cambio de dirección. De estas sesiones salió el intenso Another One Bites The Dust, un enorme éxito internacional y el primer número 1 de John.
Inspirado por el estilo de bajo que con tanto éxito utilizaba el grupo de soul Chic en aquella época, Bites The Dust salió de la nada para tomar el mundo por asalto y catapultar a la banda a un entorno completamente nuevo, como el sorprendente ambiente de los clubs de funk negro de Nueva York, que supusieron que la canción era un tema negro. Pero no todos aceptaron tan fácilmente el nuevo sonido y la nueva apariencia de Queen.
Para algunos fans, el drástico aire alternativo de The Game era excesivo, y si bien muchos nuevos oyentes se aficionaban a Queen por primera vez, algunos de los seguidores más veteranos creían que la banda se había vendido. A pesar de todo, al publicarse el 30 de junio de 1980, The Game entró en la lista de discos del Reino Unido en el número 1. Cuatro días después se lanzó en Estados Unidos, y el álbum escaló rápidamente a lo más alto de las listas, hasta convertirse en el primer álbum número 1 en Estados Unidos y también el primer álbum que coronaba las listas tanto de Estados Unidos como del Reino Unido. El álbum alcanzaría estatus de disco de oro para EMI en el Reino Unido y de platino para Elektra Records en Estados Unidos.
1979 fue un año descomunal para Queen en cuanto a giras. En enero comenzó en Hamburgo una extensa excursión europea que se prolongó a lo largo de febrero y marzo para concluir con tres noches en el Pavillion De Paris. La mayoría de los conciertos de esta gira fueron grabados, y de estas grabaciones surgió el primer álbum en concierto de Queen, Live Killers, en junio.
Después hubo espectáculos en Japón en abril y mayo, incluyendo actuaciones filmadas en el gigantesco Budokan de Tokio, y después de intervenir en un festival en Alemania el 18 de agosto (un concierto fácilmente identificable por el pelo verde de Roger), la banda regresó a Gran Bretaña en noviembre con motivo de la gira Crazy que incluía una versión reducida de la estructura de iluminación Horno de Pizza, empleada en escena desde finales de 1978. El año acabó con un concierto maravilloso en el Hammersmith Odeon de Londres, un espectáculo benéfico para Unicef para paliar la hambruna en Kampuchea. Esta actuación también fue filmada, si bien hasta ahora solo se han visto dos canciones.
1980 no fue menos loco: Queen emprendió una gira global por Estados Unidos y Canadá entre junio y octubre, incluyendo cuatro noches consecutivas en el Forum de Los Ángeles en julio y cuatro noches con todas las entradas vendidas en el Madison Square Garden de Nueva York (setiembre/octubre). En esta gira hizo su primera aparición una estructura de iluminación extraordinaria y un tanto siniestra formada por siete enormes hileras de luces móviles, llamada Matamoscas. Después de una breve pausa, grabaciones y después ensayos, y la banda regresó a Europa en noviembre y diciembre para ofrecer algunos de sus conciertos más memorables en el Reino Unido, incluyendo tres noches en el Wembley Arena.
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Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic