Bad Bunny: No tenemos claro si impactaron más sus ‘outfit’ o su zasca a los reguetoneros

Bad Bunny fue uno de los grandes protagonistas de los Grammy Latinos 2019 y no por la cantidad de premios sino por sus looks y su discurso sobre el reguetón.

Llegó a la gala envuelto en un voluminoso abrigo azul de terciopelo y solapas de esmoquin. Llamó casi tanto la atención como sus gafas de sol, con una gigante pantalla que le cubría prácticamente la mitad de su rostro. Impactó y eso que ya nos ha ido acostumbrando a este gusto por las gafas más estrafalarias que son fija en sus outfit.

Tampoco pasaron desapercibidos sus nail rings de plata en los dedos meñiques. En eso coincide con Rosalía, la manicura tiene que volverse sí o sí, tendencia para los más creativos.

Pero ahí no quedó la cosa porque luego llegó el momento de subir a recoger su premio al mejor álbum de música urbana siguió sorprendiendo con su look. Eligió una camisa ancha de manga corta con efecto patchwork de Gucci. La combinó con bermudas a cuadros rojos y blancos, zapatillas, calcetines altos, gafas de sol, sombrero de pescador con la palabra ‘Love’ y una braga al cuello.

Subió con un vaso en la mano y aclaró que se trataba de té con limón, “ese mejunje cabrón”, para su dolencia de garganta.

Aprovechó para convertirse en el portavoz de la protesta de reguetoneros como Daddy Yankee o J Balvin que habían expresado su indignación por la poca presencia de artistas de este género en la gala.

“A todos los músicos, a toda la gente que pertenece a la Academia, con respeto: el reguetón es parte de la cultura latina y está representando al igual que otros muchos géneros musicales a los latinos”, empezó diciendo.

Pero el recadito no sólo iba para la Academia, también lanzó un zasca a sus compañeros porque piensa que el género se está volviendo monótono y está más pendiente de las visualizaciones que de lo que de verdad importa.

“A mis compañeros de reguetón: Vamos a echarle ganas. Vamos a traer de nuevo la creatividad y genialidad. Hay que traer cosas diferentes a la gente”, expresó.

Tampoco podemos dejar de hablar del look que eligió para cerrar la gala con su interpretación de Callaíta. Y no hay nada que objetar al naranja, pero ojo a la máscara que cubría su rostro y las gafas por encima.

Está claro que Bad Bunny no está dispuesto a aburrirnos.