Indignación con dos youtubers que ‘devolvieron’ un niño adoptado con autismo

Dentro de la comunidad de Youtube hay grandes generadores de contenidos y mejores personas. Pero dentro de esa normalidad, lo negativo siempre sobresale. Y eso es lo que ha sucedido esta semana con Myka y James Stauffer, dos youtubers que crean contenido sobre infancia y estilo de vida y que han levantado la indignación de todo el mundo.

Los Stauffer marcaron la diferencia en julio de 2016, cuando anunciaron en un vídeo que tenían intención de adoptar a un bebé de China, su cuarto hijo, y a otro más en "Uganda o Etiopía". Subieron en seguidores, y en ingresos. A ese vídeo le sucedieron otras 26 grabaciones en las que detallaban cómo era el proceso de adopción y compartían a cámara sus emociones, informa El País.

"Actualización sobre nuestra familia" es el último contenido subido por esta pareja en el que vienen a contar que uno de sus hijos adoptivos, un niño de origen chino con trastorno del espectro autista, ha sido "reubicado". Un vídeo que llega después de que varios centenares de seguidores preguntaran por qué Huxley ya no aparecía en los vídeos.

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Ambos youtubers reconocen, aunque sin dar muchas explicaciones, que han fracasado como padres al 'devolver' o entregar a este niño a otra familia. Junto a sus otros cuatro hijos biológicos, el pequeño Huxley llevaba dos años con ellos.

El vídeo que ha generado una enorme ola de contenidos negativos hacia estos padres lleva más de dos millones de visitas y otros tantos comentarios de gente que es incapaz de entender la decisión tomada por estos influencers más aún cuando habían solicitado ayuda económica para los cuidados del pequeño.

"En las adopciones internacionales a veces hay incógnitas y cosas que no son transparentes" explicaba James Stauffer antes de que la Myka Stauffer asegurara que las autoridades les habían exigido "un ajuste diferente a sus necesidades médicas, necesitaba más". Nadie entiende cómo estos padres no han hecho todo lo posible para garantizar y cubrir esas necesidades.

En algunos comentarios que ya han sido eliminados por los autores del canal, se acusaba a los Stauffer de lucrarse comercialmente exhibiendo al pequeño durante dos años y presumir de su labor caritativa para cortar de raíz la situación en cuanto las necesidades médicas, de atención y económicas les exigían más. Su adopción y sus vídeos y fotografías les sirvieron para obtener campañas promocionales de cafés, detergentes y ropa deportiva, como ellos mismos reconocieron.

Miles de internautas están pidiendo a Youtube que desmonetice y cierre sus canales.