La pelea adolescente que cambió para siempre la mirada de David Bowie
A simple vista, parecía que los ojos del Duque Blanco eran de un color diferente
El aspecto de David Bowie siempre se caracterizó por una extrema palidez, unos cortes de pelo muy cuidados conforme al resto de su look y un vestuario tan peculiar que inspiraba a muchas tendencias de moda. Era como un auténtico extraterrestre que soñaba con vivir en Marte ya cuando llegó al estrellato, a principios de los años 70. Pero sin duda, el rasgo que más llamaba la atención en su cara era el color casi sobrenatural de sus ojos.
En muchas de las ocasiones en que hemos visto al Duque Blanco, daba la impresión de que tenía cada ojo de un color distinto. De esta forma, Bowie podría haber tenido heterocromía, que es el nombre con el que se conoce esta peculiaridad. Sin embargo, el cantante de Space Oddity no tenía los ojos de diferente color, sino que el secreto está en las pupilas del artista, con una más dilatada que la otra, algo que le ocurrió con 15 años y que mantuvo durante el resto de sus días. Esto hace que uno de sus iris no pueda reaccionar a la luz de la misma manera que el otro, por lo que queda más oscuro y da esa impresión de diferente color.
La pupila dilatada de Bowie fue el resultado de un evento traumático en su infancia, y todo fue una pelea por una chica. En enero de 1962, la futura estrella, entonces conocido como David Jones, estaba en la escuela cuando se enfrentó contra un amigo suyo, George Underwood. El resultado fue un fuerte golpe en el ojo que obligó al futuro músico a ir de urgencia al hospital.
"Fui a una fiesta a los 15 años", dijo Underwood a The Tab en 2016. "Una de las razones por las que tuve la fiesta fue porque a los dos nos gustaba esta chica. Era una estrategia para hablar con ella. Justo antes de estar a punto de conocerla, David me llamó y me dijo que no quería conocerme, que quería salir con él, lo cual era una mentira", continúa. Furioso, Underwood se acercó a Bowie y le dio un puñetazo en el ojo: "Solo quería ponerle un ojo morado por la chica, no pensé que le dejaría una marca duradera".
Esta lesión dejó a Bowie un tratamiento hospitalario de cuatro meses, después del cual los médicos llegaron a la conclusión de que el músico no volvería a ver completamente con claridad. De esta forma, se cuenta que el músico tendría para siempre una percepción de la profundidad algo sesgada.
Después de este enfrentamiento, Bowie y Underwood resolvieron sus diferencias y continuaron siendo amigos hasta los últimos días de vida del cantante. Colaboraron en una banda llamada The Konrads en los años 60, pero Underwood se desvió de la música para dedicarse más al diseño y la ilustración. De hecho, diseñó las portadas de los álbumes Hunky Dory (1971) y The rise and fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars (1972).
Hay que recordar que la heterocromía, la condición de tener los ojos de diferente color, es una condición real que se puede ver en humanos y en animales. De hecho, el hijo de Bowie, Duncan Jones, ya lo mostró en su Twitter con una foto en la que lo compara con su difunto padre.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic