Especial
El mayor fracaso de Red Hot Chili Peppers, ‘One Hot Minute’, cumple 25 años
Considerado uno de los álbumes más sobrios y oscuros de su repertorio, la salida de John Frusciante se tradujo en un fracaso de crítica y ventas
Chad Smith, Flea, Dave Navarro y Anthony Kiedis: Red Hot Chili Peppers, en 1995. / Jeff Kravitz/FilmMagic, Inc
Están grabados en las playlists de un montón de fans a lo largo y ancho del mundo. Red Hot Chili Peppers preparan su regreso a la música y lo hacen con el anuncio que muchos esperábamos: el regreso de John Frusciante como guitarrista del grupo, el golpe de efecto de Flea y los suyos necesitaban para volver a colocarse en el mapa.
Ya han publicado las primeras imágenes de la grabación del que será su nuevo disco, pero con una carrera tan dilatada como la suya tenemos que hablar de un álbum que cumple 25 años. Se trata de One Hot Minute, su sexto disco, que salió a la venta en 1995, cuando ya se habían transformado en una marca con entidad propia y en una fábrica de éxitos.
La banda estaba pasando por un momento de cambios y fluctuación que les hacía perder el control de la música que componían. La repentina fama y las extensas y multitudinarias giras que celebraban hicieron que el guitarrista John Frusciante abandonase la banda en 1992 para recuperarse de sus adicciones y grabar música en solitario. Todo ello propició la entrada de Dave Navarro, quien tomaría el papel de guitarrista, aunque solo para ese disco.
El 12 de septiembre de 1995, casi cuatro años después del lanzamiento de Blood Sugar Sex Magik, salió a la venta One Hot Minute. Esta época es considerada como la más alternativa de la banda, llevando a cabo una rara mezcla de diferentes géneros musicales y una guitarra mucho más distorsionada llevada a cabo por Navarro, con melodías más pesadas.
Se editaron tres sencillos: Warped, Aeroplane y My Friends, que llegó a lo más alto de las listas musicales. El disco fue un fracaso en ventas comparado con Blood Sugar Sex Magik, ya que One Hot Minute vendió 8 millones de copias. La crítica que recibió el disco tampoco fue tan buena como la de su predecesor.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic
