La reflexión de Ana Obregón, 5 meses después de perder a su hijo Aless: “Necesito que me entendáis”
La presentadora se sincera con el público que siempre le ha visto feliz
Se han cumplido ya 5 meses desde que Alessandro Lequio, hijo de Ana Obregón y el conde, falleciera de cáncer. Desde entonces, la presentadora no ha dejado de dedicarle cartas en sus redes sociales, con mensajes de amor y tristeza por su temprana marcha.
Pero la de hoy ha sido algo distinta. Ana le habla también directamente a su retoño pero tiene además unas palabras para el público que le ha seguido desde jovencita y al que aún le choca verle triste.
Así comienza la reflexión que, no solo habrá sido un desahogo para ella, sino que también nos da que pensar al resto:
El retiro de Ana, de la ciudad al campo
"Estos cinco meses sin ti no sabía quién era, lo que era o ni siquiera si era. Simplemente... estaba allí , como una percepción singular en medio de una nada sombría , carente de principio y final" arranca dirigiéndose a Aless.
"Aqui llevo más de un mes (me vine antes del estado de alarma)" dice refiriéndose al idílico lugar de la imagen lejos de la ciudad, "meditando en calma para encontrar la paz en este viaje hacia mi interior. Conectando con mi conciencia espiritual o el alma, porque las almas son eternas y de esta forma me acerco más a ti. Siguiendo tu ejemplo, iluminada por tu luz".
Para también comentar la situación de crisis sanitaria mundial que vivimos: "Decia Einstein que 'el auténtico valor del ser humano viene determinado principalmente en la medida que ha conseguido liberarse del Yo'. De ese Ego que contamina todo. Hasta a los políticos, que jugando a ser médicos y midiendo constantemente su Ego y su poder, conseguirán tener en su currículum un montón de vidas de españoles. Desde mi corazón mi más sentido pésame a las familias de los 50.000 ( 33.000?) fallecidos en España por esta pandemia(sindemia)".
Siento mucho compartir con vosotros mi dolor
Y, entonces, se dirige a sus seguidores y al público que le conoce desde hace décadas: "Tenéis que perdonarme, siento muchísimo compartir con vosotros mi dolor porque siempre a lo largo de 40 años en mis trabajos mi intencion era contagiaros felicidad, haceros reír, soñar, que olvidarais los problemas. Necesito que me entendáis he perdido todo, mi único hijo. Y no tengo ganas de reír, ni de bailar, ni de ponerme modelitos y por ahora no puedo trabajar".
Para agradecer también el cariño recibido: "Sé que vuestra mano anónima me acompaña y me sujeta fuerte para que no caiga más hondo. Os estoy infinitamente agradecida. También sé que mis hermanas no me han soltado la mano ni un segundo".
Y acabar, una vez más, pensando en el hombre de su vida: "Pero sobre todo sé que tú, Áless, me mandas ese inmenso amor desde la eternidad y que si algún día vuelvo a vivir será por ti".
Paula Hergar
Periodista, redactora de LOS40 y mocatriz. Crecí creyendo que vivía en una serie de televisión y todo...