Última hora
Consejos para pasear a tu perro durante el invierno y no provocarle un resfriado
Cuidado con sacar a tu mascota a primera hora de la mañana y con nieve sin ningún tipo de protección: podrías provocarle un resfriado o algo mucho peor
Una de las preguntas recurrentes de los dueños de mascotas durante el invierno es la siguiente: ¿Puedo sacar a mi perro como si nada? La respuesta, como siempre, depende. Primero, no es lo mismo un yorkshire que un American Stanford o un mastín. También depende del pelaje y las condiciones meteorológicas del lugar en el que te encuentres. Si estás en plena sierra a 10 grados bajo cero, tu mascota sufrirá más que si la sacas a pasear a las tres de la tarde por el centro de Madrid. Al final, todo se reduce al sentido común.
La borrasca Filomena y la consecuente ola de frío que ha azotado España han generado inquietud entre muchas personas por miedo a que sus mascotas se resfríen o cojan una hipotermia. La nieve, el hielo y las bajas temperaturas pueden convertirse en un cocktail explosivo para su salud, y todos los que tengamos perros o gatos en casa debemos seguir una serie de recomendaciones para que nuestros mejores amigos peludos no sufran las consecuencias.
El Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha distribuido por redes sociales una tabla elaborada por los veterinarios de la Unviersidad de Tufts en la que muestran las temperaturas a las que nuestras mascotas podrían sufrir los efectos del frío. Evidentemente, a mayor tamaño y cantidad de pelaje, menor riesgo. Un yorkshire, un teckel o un caniche podrían peligrar en temperaturas de cuatro grados bajo cero, suponiendo un riesgo extremo para su vida una temperatura de -8ºC, especialmente en razas con pelo muy corto.
En el caso de un mastín o un pastor alemán, las temperaturas de aguante son mucho mayores, y probablemente no noten nada hasta que empiecen a bajar de los 6 bajo cero, suponiendo un riesgo extremo -14ºC. Dado que durante la ola de frío los termómetros pueden rozar mínimos de 7, 8, 9 y hasta 10 bajo cero, es recomendable no salir a primera hora de la mañana, la parte más fría del día, especialmente si se tienen perros pequeños y no están protegidos.
La mayoría de recomendaciones emitidas por los veterinarios apelan a la cordura: no dejar a tu mascota en la calle, evitar que pase mucho tiempo metida en la nieve, hacer paseos más cortos, especialmente si están viejitos, y evitar el choque de temperaturas; es decir, que estén a 20 grados en casa y sacarlos inmediatamente a la calle. Un cambio tan brusco podría provocarles un shock térmico.
Otra de las recomendaciones, especialmente para los perros más vulnerables, es comprarles algún tipo de ropa caliente para protegerles el cuerpo. Lo agradecerán si se meten en la nieve. También recomiendan protegerles las patas del hielo poniéndoles vaselina, crema o incluso algún tipo de calcetín impermeable. Cuanto más eviten el suelo helado, mejor. No es una cuestión de moda, sino de seguridad.
Gatos y pájaros: peligro inminente
Los gatos y los pájaros son los que más están sufriendo el temporal. Los felinos callejeros no tienen dónde resguardarse y muchas veces se esconden en espacios cerrados como los motores de los vehículos –entran desde abajo– o los contenedores de basura. Antes de arrancar el motor o tirar una bolsa sobre un contenedor, recomiendan dar un par de golpecitos en la superficie para espantarlos.
Con los amigos alados la situación es crítica: las heladas han acabado con parte de su suministro habitual de alimentos, como las lombrices y otros insectos pequeños de los que se nutrían en las calles, árboles y parques. Los que no han muerto de frío, podrían morir de hambre. Lo recomendable es poner un poco de alpiste o restos de pan en los alféizares de las ventanas (siempre en un cuenco para que el aire no se lo lleve) y que así puedan alimentarse.