Jeff Bezos, fundador de Amazon, viaja al espacio y hace historia

Cortito pero intenso. Así ha sido el viaje de Jeff Bezos, fundador de Amazon, al espacio exterior. Tan solo fueron 11 minutos, pero tienen un significado tremendo: se trata del primer vuelo de la historia no pilotado y con una tripulación cien por cien civil. Y muy especial el día elegido, ya que el 20 de julio pero de 1969, el ser humano pisaba la Luna por primera vez.

La compañía del magnate en la consecución de este hito es realmente variada. En primer lugar, su hermano Mark. Desde el momento en el que se dio el visto bueno a la realización de la travesía, ya se conocía que su cercano familiar estaría a bordo.

A continuación, los otros dos astronautas batieron dos récords muy particulares. Wally Funk, la pionera aspirante a astronauta en los sesenta, se convierte en la persona de mayor edad en viajar al espacio a sus 82 años. Por su parte, Oliver Daemen consigue exactamente lo contrario: ser el más joven en hacerlo con 18 años. Eso sí, no le salió barato precisamente, ya que su asiento surgió de una subasta que se cerró en 28 millones de dólares.

Esos 11 minutos han sido los mejores del bueno de Bezos: “¡Es el mejor día de mi vida!”, gritó al aterrizar. Antes, estuvo 4 minutos en gravedad cero con unas vistas al alcance de muy pocos: la Tierra vista desde allá arriba (algunos tendremos que conformarnos con Google Earth). Todo ello, a bordo de su propia nave, New Shepard, de su compañía Blue Origin.

Este es tan solo el inicio de la nueva carrera espacial entre magnates que se vive en el siglo XXI. Bezos, tras ceder el mando de Amazon a Andy Jassy, ha dejado claro que pondrá todos sus esfuerzos ahora en hacer naves y viajes como este. Richard Branson, dueño de Virgin Galactic, un poco más de lo mismo, y ojo porque hace unos días se adelantó a sus competidores volando a las estrellas en su nave. Por último, está Elon Musk. El carismático fundador de Tesla y Space X es el más ambicioso de los tres, ya que quiere llevar astronautas a la Estación Espacial Internacional y también confía en alcanzar Marte en un futuro próximo.

Parece ciencia ficción, pero nada más lejos de la realidad. La NASA y demás países poderosos ya no son los únicos jugadores con cartas encima de la mesa. Ahora, con mucho (muchísimo) dinero, cualquiera puede viajar más allá de nuestro planeta.