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Llega la unificación a ‘Secret Story’ y una pareja resulta perjudicada con la repartición de camas
Cambios estratégicos en la convivencia de cara a la final
Secret Story está llegando a su final y se nota, entre otras cosas, porque el número de concursantes se ha reducido considerablemente. Eso ha hecho pensar a la organización que sobraba una de las habitaciones. Por eso, aunque eso de la reunificación nos recuerda más a Supervivientes, ha tenido lugar también en la casa de los secretos.
Jordi González se lo ha anunciado a todos los habitantes y les ha dado tres minutos para desalojar las habitaciones y llevar todas sus pertenencias personales al almacén. Todo lo que no recogieran, tenían que darlo por perdido.
Ahí es cuando han empezado las carreras para intentar no dejarse nada. Pero, como suele ocurrir en las mudanzas, siempre hay cosas que se extravían y Luis Rollán ha perdido su rosario.
Y no ha sido lo único, también ha perdido su habitación porque se han apagado las cámaras de la habitación que compartía con Gemeliers y Luca y Cristina. Así que, tocaba el traslado. Cuando el resto estaba celebrando que conservaban su espacio, Jordi les ha anunciado que era seguro que conservaban su habitación, pero no tanto que ocurriera lo mismo con sus camas.
Repartición de camas
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“Que te quiten la habitación donde has estado dos meses y medio es complicado”, aseguraba Isabel Rábago desde plató, “sobre todo cuando vas a una habitación enemiga”. Alonso Caparrós, por su parte, estaba expectante por ver qué sucedía con la cama de Julen y Sandra ya que considera que tras la visita de Tom Brusse, han cambiado un poco las cosas entre ellos.
Jordi González les enseñó una imagen del Cubo donde había fotografías de cada uno de ellos. Les explicó que tenían un minuto para coger su foto y colocarla en la cama que les gustaría tener a partir de ahora.
Han salido todos corriendo como si no hubiera un mañana y finalmente han elegido cama. Pero Jordi les ha anunciado que Luca, Julen y Miguel habían hecho trampa porque les había pedido que cada uno cogiera su foto y ellos han cogido las de Adara, Sandra y Cristina. Así que, a empezar el juego.
Una habitación nueva
Han devuelto las fotografías al Cubo para repetir la carrera. Nada más escuchar tiempo las carreras y los empujones para ser el primero han dado lugar a una repartición de camas que solo ha perjudicado a una pareja: Adara y Miguel.
Pero lejos de montar un drama como suelen hacer, se lo han tomado con bastante deportividad. “Siempre podemos acostarnos en la misma cama y cuando nos entre sueño irnos a nuestra cama. No pasa nada”, aseguraba un calmado Frigenti.
Veremos cómo resulta la convivencia a partir de ahora que si ya es tensa de por sí, compartiendo habitación puede que aumente… o no.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...