'No Quiero' se reinventa con un álbum cinematográfico
El trío publica 'Monterey' junto a 6 videoclips documentales
Antón Uribe, Alberto Macías y Gaby Salaverry son tres amigos que, aburridos de la cotidianidad, se unieron para formar un nuevo proyecto. 'No Quiero' es la llave para su felicidad y 'Monterey' un contrapunto alegre y de celebración. Este último álbum llega a nosotros en formato documental-musical, con un conjunto de cortometrajes repletos de historias de Bilbao.
Las canciones reflejan la vida y la necesidad de reaccionar ante lo que no desean pero sí ansían. Después de 'Ficción' y 'Cuatro paredes', el grupo bilbaíno ha querido recuperar con guitarras y melodías pop-rock todo el entusiasmo perdido durante la pandemia. En CARA A nos cuentan los detalles sobre la música y la expresión audiovisual que completan su trabajo.
Cara A: Vosotros sois 'No quiero', un nombre muy significativo para un grupo, ¿No?
No Quiero: Sí, se nos ocurrió gracias a las dos hijas de Gaby. Ellas están todo el día diciendo "No Quiero" y un día estábamos trabajando en el proyecto, pensando en cómo nos íbamos a llamar y dándole bastantes vueltas, y de repente nos acordamos de esas dos palabras. Además, parece que tiene un recorrido y un enganche porque no tiene por qué sonar en negativo, sino a 'No quiero, porque quiero esto'. Creemos que a veces hay que dar un golpe en la mesa y reaccionar ante lo que viene impuesto. Planteamos el nombre entre los 3 integrantes del grupo y nos gustó porque enfoca muy bien lo que queremos para el proyecto.
Cara A: Para conoceros un poco mejor, nos gustaría saber realmente qué queréis y qué no.
NQ: Queremos que la gente despierte un poco, que piense por sí misma. De la música esperamos que crezca el nivel cultural para que la gente pueda valorarla por lo que es y no por otros elementos. El mundo está bastante anestesiado y hay que espabilar. También nos gustaría ser felices y 'No Quiero' es una herramienta para conseguirlo. Aspiramos a pasarlo bien, a sentirnos realizados haciendo música y a estar a gusto con nuestros compañeros involucrándonos en todas las iniciativas que estamos tomando: los videoclips, las grabaciones, las giras... Y si luego, además, podemos decir lo que queramos a través de una banda, con nuestras canciones y de nuestras letras, pues mejor. Tener la libertad de expresarte y de que te escuchen es bastante gratificante.
Cara A: Tenemos en la mano el disco de 'Monterey' y tiene una portada muy chula, es muy cinematográfico, ¿Era vuestra intención?
NQ: Sí, sí, fíjate. Cuando nos metimos en este lío vimos que necesitábamos hacer un videoclip para promocionar la música. Antón es realizador y contar en la banda con alguien que sabe del tema hace las cosas mucho más fáciles. Puedes permitirte ser más ambicioso. Entonces, empezamos a plantearnos que todos los temas tuviesen su vídeo. Llevamos ya cinco y nos quedan cuatro. Al final, todo el álbum se convierte en una especie de documental musical que va contando historias en Bizkaia y con personajes ficticios que nosotros mismos nos inventamos. En el fondo es una manera de contar una película, así que nos apropiamos de ese concepto a la hora de diseñar la portada. Nos inspiramos en James Bond, en Erase Una Vez en Hollywood, en Tarantino... Toda la estética está basada en las películas retro.
Cara A: A la hora de producir vuestras canciones, imaginamos que vuestros gustos personales tienen mucha influencia, ¿son muy diferentes entre sí?
NQ: No, la verdad es que tenemos una especie de denominador común que es el rock. Nos gustan las guitarras, las bandas clásicas, la historia de la música... Incluso bandas del 2000. Luego, cada uno tiene sus matices que están muy influenciados por cómo se ha configurado la escucha musical de hoy en día: las playlists, las plataformas de streaming... Puedes estar escuchando todo tipo de estilos e investigar y descubrir muchos ritmos nuevos. De cierta manera, esa diversidad que hemos estado escuchando ahora se ha trasladado a las canciones. Oímos de todo y todo aporta.