Especial
La reacción de Kim Kardashian a la nueva campaña de Baleciaga: “Estoy reevaluando mi relación con la marca”
La influencer se siente disgustada con las imágenes
Kim Kardashian es la actual embajadora de Balenciaga, la famosa marca de lujo que se ha visto envuelta en una polémica por su última campaña en la que aparecen niños con osos de peluche vestidos de sadomasoquitas. La propia marca ha presentado una demanda contra los productores que se han encargado de crearla, pues muestra una referencia con la pornografía infantil.
La influencer, después de unos días de silencio, ha opinado sobre estas fotografías, que ya han sido borradas de todas las cuentas de la marca. "He estado callada durante los últimos días, no porque no me hayan disgustado e indignado las recientes campañas de Balenciaga", comenzaba a explicar por redes sociales, "sino porque quería tener la oportunidad de hablar con su equipo para entender por mí misma cómo pudo haber sucedido esto".
Una de las razones por las que más se ha indignado ha sido por ser madre y sentir que es una campaña que vulnera la seguridad de los menores: "Como madre de cuatro hijos, me han conmocionado las imágenes perturbadoras. La seguridad de los niños debe tener la máxima consideración y cualquier intento de normalizar el abuso infantil de cualquier tipo no debe tener cabida en nuestra sociedad, punto".
Además, ha terminado su mensaje en Twitter aclarando que está valorando si seguir con la marca, ya que es algo que no debería haber sucedido: "En cuanto a mi futuro con Balenciaga, actualmente estoy reevaluando mi relación con la marca, basándola en su voluntad de aceptar la responsabilidad por algo que, para empezar, nunca debería haber sucedido, y las acciones que espero verlos tomar para proteger a los niños".
Balenciaga pide perdón
El pasado martes 22 de noviembre, la marca borró las fotografías de la campaña después de recibir multitud de críticas en redes sociales. Además, dejó un mensaje pidiendo disculpas a todas las personas que se han sentido ofendidas: "Nos disculpamos sinceramente por cualquier ofensa que nuestra campaña navideña pueda haber causado", dijo Balenciaga en su cuenta de Instagram.
"Nuestras bolsas de osos de peluche no deberían haber aparecido con niños en esta campaña", terminaron de aclarar. Horas más tarde, volvió a declarar que en otra campaña se mostraban "documentos inquietantes" que se referían a un caso de la Corte Suprema relacionado con las leyes de pornografía infantil.
"Nos tomamos este asunto muy en serio y estamos tomando acciones legales contra las partes responsables de crear el set e incluir elementos no aprobados para nuestra sesión de fotos de la campaña Spring 23. Condenamos enérgicamente el abuso de niños en cualquier forma. Defendemos la seguridad y el bienestar de los niños". Con estas palabras, Balenciaga terminó de aclarar todo lo sucedido.