Lady Gaga, demandada por la mujer implicada en el secuestro de sus perros

Lady Gaga ha vuelto a estar en la palestra, aunque esta vez por un motivo bien diferente a su música. Para ello hay que remontarse a dos años atrás cuando la artista se enfrentaba a uno de los peores momentos de su vida, al perder sus dos perros, Gustav y Koji, que fueron secuestrados a punto de pistola a manos de su cuidador en una calle de Los Ángeles. A las horas, la intérprete de Bad Romance publicaba en sus redes sociales un mensaje en el que ofrecía una recompensa de hasta 500.000 dólares a quien pudiese devolverse sus mascotas y sin hacer “ningún tipo de pregunta”. Algo que se solucionó varios días después porque la cantante se acabó reencontrando con ellos.

Sin embargo, lo que pareció ser una historia con final feliz se acabó convirtiendo en una auténtica pesadilla para la cantante. Y es que Jennifer McBride, la persona encargada de devolverle los perros, acabó siendo acusada de entrar en una propiedad privada y de ser cómplice del robo de estos, al tener relación con el padre de uno de los hombres responsables del asalto.

Ahora, según publica el medio TMZ,McBrinde ha demandado a la cantante y le ha reclamado los 500.000 dólares que la propia artista ofreció como compensación y que esta nunca llegó a percibir. Pero no acaba aquí la historia, ya que la demandante también le ha reclamado aún más dinero, hasta un millón de dólares, al “ofrecer una recompensa falsa”.

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La cabecera mencionada anteriormente ha aportado más datos sobre esta historia, dos años después de que sucediesen los hechos. Según TMZ el paseador de perros de Gaga, Ryan Fischer, varios hombres le increparon disparándole y robándole a las mascotas cuando curzaba por una de las calles de los Ángeles el día 24 de febrero de 2021. Con la ayuda de los vecinos y los médicos consiguió sobrevivir. Aunque meses después relató en su perfil de Instagram que una de las balas del pecho le acabó provocando un colapso pulmonar.

Nuevamente en palabras del medio, la policía señalaba a Jame Howards Jackson como la persona encargada de disparar a Fischer, aunque nunca confesó los hechos, y fue sentenciado a 21 años de prisión. Aunque Associated Press llegó a asegurar que este individuo acabó aceptando un acuerdo en el que se declaraba culpable de los hechos, pero rechazando el intento de asesinato.