Ana Peleteiro recuerda el acoso en el instituto: "Te han hecho un daño tremendo"

La Sexta emitió en la noche del jueves el último capítulo de la temporada de El Camino a Casa, el programa conducido por Albert Espinosa en el que los invitados, todos rostros conocidos del mundo de la cultura y el deporte, rememoran con el escritor cómo fue su barrio, su etapa escolar y, en definitiva, cómo fueron sus inicios antes de ser quienes son ahora.

El último honor lo ha tenido Ana Peleteiro, la medallista olímpica que, con barriga de 32 semanas entonces y todo, se paseó junto al autor por las calles de la comarca de Ribeiro, en Ourense; aquellas que la vieron crecer. Ha sido en este paseo melancólico donde la atleta ha vivido reencuentros como el de su amiga de la infancia María, "la robanovios" o con sus tías.

Pero no todo fue un camino de rosas y, como suele ocurrir, incluso la risueña Peleteiro tuvo que revivir experiencias del pasado que no resultan tan enternecedoras, como la muerte de su abuela o el acoso que sufrió desde pequeña en el instituto.

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"La primera vez que me llamaron 'negra de mierda'"

"Ahí fue cuando sufrí un poco de bullying, no digo bullying porque yo me defendía en todo momento, pero tuve que pelearme varias veces. Mi padre se pasaba todo el día en la jefatura de estudios, la verdad, pero encantado, porque siempre me decía que me defendiera", recordaba.

"Aquí fue la primera vez en mi vida que me llamaron 'negra de mierda', por eso tuve que estar a la defensiva siempre. Pasé de un colegio en el que estaba muy feliz, a empezar a tener peleas, discusiones, tener que defenderme... No recuerdo este instituto con buen sabor de boca", lamentaba ella.

"Te han hecho un daño tremendo y has tenido la capacidad de perdonar y olvidar. Tu mirada ofrece esa maravillosa fuerza", comentó el escritor con admiración hacia la deportista. Unas palabras a las que ella respondió con sinceridad y ningún rencor: "¿Cómo vas a vivir amargado si tienes una familia maravillosa que te da solo amor?".

Aunque no es la primera vez que habla abiertamente del acoso escolar que sufrió durante parte de su etapa como estudiante, pero sí ha sido la vez en la que más ha detallado un poco más sobre su infancia. Sorprendentemente, Ana Peleteiro revelaba que en aquellos años había sido una chica "un poco macarrilla": "Me castigaron, no me llegaron a expulsar, pero estuve al límite".

La atleta, bronce en triple salto, recuerda una pelea "a puñetazos" que tuvo en el despacho de la orientadora: "Fue una chavala, que nos estábamos picando, y luego cogió y me atacó delante de los mayores, que eran los de los ciclos, para dejarme en ridículo. Luego, vino a pedirme disculpas y no hubo perdón", cuenta ella misma.

Sobre este momento concreto, Peleteiro reconocía que se encontraba un poco "a la defensiva": Tuve suerte de no meterme en cosas chungas, porque con mi carácter en el instituto podría haber sido lo que soy o dejar el atletismo y meterme en cosas...", cuenta. Aunque la orientadora del centro recordaba que su familia siempre "estaba detrás": "Me hablaba muchas veces de su abuela".