Vestido de princesa, canciones inéditas y mucho baile: así ha sido la boda de Rigoberta Bandini

Paula Ribó, más conocida por su nombre artístico Rigoberta Bandini, le dio el sí quiero a su chico, Esteban Navarro el pasado 18 de mayo en una discreta ceremonia civil a la que apenas hubo invitados y este fin de semana, aprovechando la llegada del buen tiempo a Cataluña, la pareja ha querido celebrar su amor con sus familiares y amigos y ha organizado una ceremonia y una fiesta en la que, esta vez sí, se han dicho que sí para siempre ante la mirada atenta de su círculo.

La boda, que no ha tenido efectos legales al estar ya casados, se ha celebrado en una masía de Cataluña y ha transcurrido prácticamente entera al aire libre. Según ha recogido la prensa y se ha podido ver a través de las pocas publicaciones que familiares y amigos han hecho en las redes sociales, lo que no faltó en ningún momento fue el humor.

Humor en la ceremonia y en la comida

Primero el novio entró en la ceremonia cogido del brazo de su madre y al son de la canción de Mr Bean y después, cuando llegó el momento de leer los votos, Rigoberta Bandini sorprendió a su chico y a todo el público cantando una canción inédita que había escrito para la ocasión titulada Forever Crush en la que, en un tono cómico, le mostraba todo su amor al que ahora es su marido narrando cómo ha sido su historia de amor. "Tranquilos y sin dudarlo nos fuimos acercando; sabíamos que algún día podía pasarnos; sin duda tú eres para mi un forever crush; de todas las personas que podía imaginar; no hay nadie como tú; no hay duda de que tú eres para mí un forever crush", cantó la artista.

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Pero esto no fue todo. Tanto para entrar a la zona en la que se iba a llevar a cabo la comida como para cortar la tarta la pareja echo mano de performance y primero, mientras sus invitados hacían el ya tradicional gesto de levantar las servilletas para celebrar la entrada de los novios al banquete, Rigoberta Bandini y Esteban Navarro bailaron Juanita Banana, el icónico tema del cantautor argentino Luis Aguilé.

Para el momento tarta, la pareja escogió, nada más y nada menos que, Barcelona, la canción con la que Freddie Mercury y Montserrat Caballé unieron fuerzas en 1987 y que acabó convirtiéndose en un éxito internacional gracias a los Juegos Olímpicos de la Ciudad Condal en 1992.

Un vestido de novia de princesa

Rigoberta Bandini estaba resplandeciente con un vestido de novia blanco de silueta princesa bastante clásico cuyo diseñador todavía no se ha hecho público. Ribó estaba guapísima con un corpiño a modo de corsé ballenado con escote de palabra de honor bordado que contrastaba con la silueta de la falta larga de tul que le llegaba a ras del suelo.

Como complementos Paula lució unos tacones de salón en el mismo tono que el vestido que después se cambió por unas zapatillas deportivas blancas, unos pendientes cortos muy discretos, un ramo de flores blancas y un velo corto que, al finalizar la ceremonia, también se quitó.

Eso sí, para después del banquete, Rigoberta Bandini decidió cambiarse y quitarse el tul de novia y lucir un vestido corto blanco estilo blazer lencero de su amigo y diseñador Joan Ros Garrofé, quien, a juzgar por las imágenes en las que se le puede ver cantando a pulmón Dime de Beth en el banquete, se lo pasó en grande disfrutando con la autora de Ay Mama, su recién estrenado marido, sus familiares y amigos y como no, su hijo Nico.