Tommy Lee confiesa que llegaba a beber hasta 7 litros de vodka al día: "No sé cómo estoy vivo"

Tommy Lee aparece en el podcast Club Random del cómico Bill Maher para para hablar de sus sentimientos, de cómo se siente tras tantos años de pasarse de la raya y de sus problemas personales. Sobre todo, se ha centrado es su adicción al alcohol, un tema que ha tratado más veces pero es una historia que nunca deja de sorprender. De hecho, en esta entrevista ha confesado que llegaba a beber hasta 7 litros de vodka al día. Lee volvió a mostrarse muy rotundo sobre todo lo que vivió con su adicción, llegando a confirmar que no sabe cómo está vivo.

"El alcohol es jodidamente raro, porque... ¡Joder! Es fácil enamorarse de él, de cómo te hace sentir, de cómo te relaja, y de repente te pones en plan '¡Joder! ¿Estoy bebiendo dos galones de vodka al día?' Esto no es... Ahora estás intentando suicidarte", comenzó confesando el baterista. Dos galones de vodka equivalen a 7 litros y medio por lo que la reacción del entrevistador fue de sorpresa absoluta.

Para cualquier persona es inimaginable ingerir esa cantidad de alcohol y poder contarlo más tarde. Maher le preguntó cuánto tiempo fue capaz de consumir tal barbaridad de vodka. "Te lo juro amigo, lo juro por Dios. Joder, tío, durante mucho tiempo. En ese momento, tu hígado va con muletas; apenas funciona", contestaba Lee.

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Si ya es loco pensar que una persona puede ingerir esa cantidad de alcohol, más increíble es pensar que a día de hoy esa época no le ha pasado factura. "No puedo creerlo... Me pellizco a diario. Acabo de hacerme el escáner de cuerpo entero, donde hacen, de la cabeza a los pies todo, y no puedo creer que después de fumar, beber, toda la puta mierda tonta, o la mierda divertida que he hecho. Tío, el médico estaba, como, 'Estás bien'. Y yo estaba, como: '¿Estás seguro de que tienes la...? Déjeme ver. ¿Es mi nombre el que está ahí, o hay algún japonés aquí que tiene sus resultados de los que está leyendo? Porque me parece jodidamente imposible. Esto es imposible'”.

Tommy recalca que lleva limpio unos años. Y por eso es que continúa vivo tras décadas experimentando un sinfín de alcohol, drogas y rock'n'roll. "En el '89, '90 es cuando, como banda, estábamos, como, 'Ok amigo, alguien no va a despertar una mañana. Esto se está volviendo jodidamente ridículo'", cuenta que ahí es cuando se dio cuenta de que debía parar.

Su fuerza de voluntad hizo que a día de hoy siga disfrutando de la vida y no haya tenido un final peor. Sigue vivo y feliz pero sin olvidar que muchos no sobreviven a una vida como la que él ha llevado.