Entrevista a Sandra Monfort: "Le he puesto toda mi alma a 'La Mona'"
La artista valenciana visita LOS40 para presentar su segundo álbum, repasar su trayectoria y hablarnos del futuro
Sandra Monfort (Pedreguer, 1992) es de esas artistas capaces de pisar un escenario con la energía suficiente como para hacerte sentir que juntas podéis parar un tanque para, solo unos minutos después, desgarrarte un poco el alma con una voz suave y melódica y unas líricas melancólicas en las que, además de ciertos tintes de tristeza, hay rabia, nostalgia y por supuesto, esperanza, superación y una buena dosis de amor propio.
Esta cantante y compositora valenciana, amante de Rodrigo Cuevas y Sevdaliza, lleva dedicándose toda la vida a la música. La valenciana ha visitado LOS40 para contarnos todos los detalles sobre su nuevo álbum La Mona y hablarnos sobre su larga trayectoria en la industria musical como guitarrista clásica con estudios de conservatorio, miembro del grupo Marala y ahora, vocalista en solitario y autora de dos álbumes de estudio por los que ha recibido diversos premios como el Carles Santos de la Consellería de Cultura de la Generalitat Valenciana.
Pregunta: Para los que todavía no te conocen ¿Quién es Sandra Monfort y como ha llegado a lanzar dos álbumes en solitario y a formar parte de Marala trío?
Yo empecé a estudiar guitarra clásica en el conservatorio pero me di cuenta de que no era lo mío... Entonces empecé a estudiar la música tradicional. A investigarla y a encontrar la belleza en ella. Me parecía muy interesante y de ahí empecé con Marala, que también estaban en este camino y nos entendimos super bien.
Por otro lado, me interesaba mucho también la electrónica así que decidí mezclar dos mundos, lo tradicional y lo electrónico, y ese fue el nido de mi proyecto en solitario.
P: Y Marala, ¿Qué significa para ti?
Significa muchas cosas... A nivel profesional es una palanca para ir investigando a nivel sonoro qué es lo que nos interesa y hacia dónde queremos encaminarnos. A nivel personal me llevo muy bien con ellas y estoy aprendiendo muchísimo de la posición de la mujer en la vida, respecto a lo laboral, a lo emocional, a lo intelectual... Compartimos mucho tiempo y se entrelaza mucho lo laboral con lo personal, cosas que se entrelazan muy bien y hace que ambas vertientes crezcan.
P: Como tú estás en ambos lados… ¿Qué crees que es lo mejor y lo peor de formar parte de un grupo musical?
Lo mejor es la hermandad que se genera cuando estás trabajando en equipo, el feedback que te da el público y te llegan mensajes preciosos, y lo peor, creo que todos los artistas coincidiríamos, es la carretera... Estar siempre moviéndote, comiendo mal... Creo que todos los artistas, si les diesen la oportunidad de cumplir un deseo, pedirían teletransportarse.
Creo que todos los artistas, si les diesen la oportunidad de cumplir un deseo, pedirían teletransportarse
— Sandra Monfort
P: ¿Y de ser artista en solitario?
Lo mejor es que tienes total libertad para decidir lo que te de la gana, siempre un poco al margen de la industria porque estamos al servicio de nuestro público y de que guste lo que hacemos. Queremos que llegue... Tiene que apelar algo en la gente...
Lo peor es que a veces te sientes muy sola. Hay tanta responsabilidad, hay tanta exposición de tus emociones que a veces te sientes muy vulnerable y muy frágil.
P: Respecto a tu carrera en solitario, con Niño Reptil Ángel, el primer álbum que sacaste en solitario en 2021, explicabas que todo había sido muy improvisado y que no te gustaría que esto te pasase con un segundo trabajo. ¿Ha cambiado tu manera de componer o de crear con La Mona?
Absolutamente sí. Niño Reptil Ángel fue un poco como una vomitona. Dije, venga, tengo todo esto aquí y voy a sacar un disco, un poco por el romanticismo de hacerlo, pero sin pensar nada en absoluto a dónde quería llegar o qué quería hacer... Fue un juego. Pero La Mona me lo he tomado muy diferente, incluso como algo empresarial. Es un proyecto más sólido y más consolidado, todo tiene un sentido dentro de La Mona, tanto el imaginario como las letras, el color, el discurso... Para mí ahora, es cuanto más mejor. He invertido mucho dinero en este proyecto, le he puesto toda mi alma, si le pudiera poner un perfume, se lo pondría también... Lo he cuidado al máximo y le he puesto mucho amor. Para mí, es como mi pequeña empresa, que quiero que crezca y florezca y de sus frutos por sí misma.
P: Tanto en Niño Reptil Ángel como en La Mona encontramos dos conceptos muy potentes, ¿puedes hablarnos de ellos?
Niño Reptil Ángel era un disco que intentaba dar lugar a lo frágil, lo vulnerable, lo feo y lo deforme. Porque me parece que todos tenemos un niño reptil ángel dentro. Representa todas esas veces que nos miramos al espejo y nos vemos feas, o decimos algo y nos arrepentimos porque sentimos inseguridad... Y es algo que realmente es bello, que forma parte de nosotras y es bonito abrazarlo. Niño Repil Ángel era un viaje alrededor del contorno de nuestra alma, es darle un lugar a lo que no nos gusta de nosotras. Y La Mona es todo lo contrario.
La Mona es decir, 'Si no te gusta, te pones flores en la boca y te callas. Esto es lo mío'. La Mona era un juego de cartas al que jugaba con mi abuela en el pueblo. Era la Sota de Oros, que en algunos sitios la llaman la solterona o la puta de oros. El símbolo de la carta es una persona que levanta una moneda de oro y representa a la mujer dueña de su capacidad afectiva, económica, dueña de ella misma y consciente. Es una señora que está segura de sí misma y le da igual todo lo que le digan. Y yo quería abanderar este concepto y darle la vuelta a un concepto que nos han enseñado que era peyorativo. Nos han enseñado que las mujeres tenemos que ser como hadas y a veces podemos ser también unas garrulas o unas zorras si hace falta, y está perfecto también.
P: Musicalmente, en ambos hay claras referencias al folklore valenciano y peninsular, ¿Qué es lo que hace que, en un momento en el que la música está bebiendo mucho de los ritmos latinos, tú decidas mantener tus composiciones ligadas a tus raíces?
La música tradicional tiene algo muy puro y muy arraigado a un tiempo en el que las cosas iban más lentas. Veo en la música tradicional, la latina incluso, algo que me recuerda que todo tiene un proceso y necesita unos cuidados... Te cuenta como vivían nuestras abuelas, cómo amaban, como era el patriarcado... Y está todo ahí, en una canción. Y yo siempre he querido meterla en mi trabajo y ahora, incluirla en el pop.
P: Y volviendo a La Mona en lo puramente musical… ¿Qué es lo que van a encontrar en él los que todavía no lo han escuchado?
Va a encontrar pasodobles, boleros, bachatas, alguna balada... Es un triángulo entre la música de los ochenta, la música folclórica y la música electrónica popular actual con canciones en castellano y en valenciano.
P: ¿Por qué decides incluir ambos idiomas en un mismo álbum?
Para mí es importante cantar en valenciano, en mi lengua materna. Si no lo hiciera sentiría que estoy corrompiendo algo en mí. Es una decisión política, emocional y sentimental. Para mí es la manera más honesta de cantar. Pero a la vez, también me gusta expresarme en castellano y me sale de manera natural a veces. Además, hay una parte en la que quiero que mi música llegue a gente que no es valencianohablante. Quiero ofrecerle mi música en castellano para que pueda llegar a las canciones que son en valenciano.
P: Tienes letras tan nostálgicas como la de ‘Papallones de cristal’ o la de ‘Las flores’, que tiene versos tan potentes como ‘Quererte fue morir una y otra vez’, ¿en qué te inspiras para escribir versos tan desgarradores?
Me inspiro en las rupturas. Siempre que he tenido una ruptura, ya sea con una pareja o con una amiga, las rupturas son momentos en los que en tu muro se abre una grieta y es doloroso pero a la vez te deja entrar la luz. Las rupturas, a veces, son momentos de cuestionamiento en los que te preguntas qué es lo que pasa dentro de ti para haber aguantado semejante maltrato o relación tóxica...
'La Mona' la escribí después de una ruptura, durante un proceso de duelo en el que me cuestioné mucho a mí misma
— Sandra Monfort
La Mona la escribí después de una ruptura, durante un proceso de duelo en el que me cuestioné mucho a mí misma y a la posición de las mujeres en el patriarcado... Las canciones hablan desde este lugar. Desde el querer apartar esto de nuestras vidas y activar el radar de lo malo antes de que estemos en la mierda.
P: El álbum ha tenido un muy buen recibimiento tanto de tus fans como por parte de la crítica, incluso te han dado varios premios, ¿te esperabas este recibimiento?
No me lo esperaba, pero lo deseaba. Me lo he currado mucho, he trabajado un montón, le he puesto toda mi alma y considero que en el País Valencià, es un producto que está al nivel. Está rompiendo cosas. Y no digo que sea la única, hay otros artistas que están ofreciendo cultura desde un lugar super potente y con mucho nivel y considero que le mío también lo está... Quiero que La Mona llegue a la gente y que valoren todo lo que he trabajado aquí.
P: ¿Cuál es la canción más especial para ti de todo el álbum de La Mona? ¿Por qué?
Para mí la más especial es Moreneta. Es la última canción que escribí del álbum y se la escribí a mi abuela cuando falleció. Es una canción para mi familia. Es un regalo de ella para mí y para el resto de la familia. Siento que me lo chivó todo al oído cuando se iba y para mí este tema es muy especial.
P: El que te sigue un poco sabe que tú siempre tienes un discurso antipatriarcal. ¿Estás notando algún tipo de desigualdad en el mundo de la música por ser mujer?
Sí, por supuesto. El patriarcado sigue estando aquí, tanto en la música clásica como en el pop, en todos los circuitos sigue habiendo mucha presencia masculina y mucha infantilización de las mujeres. Te tratan desde el paternalismo y el cambio grande que está habiendo es que, antes nos callábamos y ahora nos encaramos y decimos basta. El feminismo nos está dando soporte para que podamos decir ya basta sintiéndonos a salvo.
P: Con una vida en la que el movimiento es constante, en la que se pasa mucho tiempo en trenes, furgonetas, etc. ¿Qué es lo que echas más de menos de estar en casa?
El descanso... Descansar en casa es algo que añoro muchísimo. Tener ratitos de no pensar en nada de lo profesional, simplemente tener una buena conversación con una amiga junto al fuego mientras tomamos una copita de vino, o un buen libro, o un paseo por los naranjos... Una cerveza en mi pueblo con mi amiga... Estar tranquila en definitiva.
P: ¿Y qué artista te acompaña siempre en el camino? El o la que no puede faltar en tus playlist.
Caroline Polachek podría ser una buena referente, Kate Bush y Rosalía, que es un referente y siempre lo será. Estas tres.
P: En cuanto a géneros, ¿qué es lo que más sueles escuchar?
Depende de la época. Me gusta mucho la música de los ochenta, la electrónica experimental, como la de Björk, y el pop. Me encanta Bad Bunny también, el reguetón y Beyoncé me flipa también.
P: Y miremos al futuro, ¿cómo te ves en un futuro cercano?
Me veo guapísima (risas). Guapísima, simpatiquísima y graciosísima, como siempre.
P: No sé si has seguido las anteriores ediciones del Benidorm Fest… ¿Te plantearías presentarte alguna vez?
¡Pues me he presentado! Presentamos la candidatura con Marala, pero no nos han cogido. Pero nos encantaría, es bastante diver... Y en solitario también me presentaría. ¡Yo a tope con lo que sea, Benidorm Fest, para arriba!
P: Y por último, para despedirnos, ¿has estado siguiendo las últimas ediciones de Operación Triunfo? ¿Qué opinión te merece este tipo de programas?
Sí que lo he visto. Las últimas ediciones me han gustado bastante. Han salido artistazos de ahí como Amaia y Natalia Lacunza, a las que sigo y me encantan. No me planteo presentarme y no me gustaría haberlo hecho tampoco en el pasado. No es mi clima, pero me parece un programa chulo, una buena plataforma para sacar a artistas con mucho talento y darles luz.
Carolina Martínez
Periodista y SEO editorial en LOS40. Propongo estrategias y escribo sobre todo lo que mande la actualidad....