Especial
Red Hot Chili Peppers: El secreto mejor guardado de ‘Under the bridge’
La madre de Frusciante participa en los coros de la oda a Los Ángeles
Un puente en el centro de Los Ángeles. Bajo una autopista. Una época en la que Anthony Kiedis “no tenía nada en la vida”. Tan solo a Mario. Exconvicto, miembro de la mafia mexicana. En su compañía, pateaba la ciudad buscando su siguiente chute de heroína. Un caluroso día de verano encontraron lo que buscaban… ‘bajo el puente’. Un sitio que el líder de Red Hot Chili Peppers tiene clavado en su cerebro porque le recuerda “un momento crítico en mi vida”. El angelino ha desvelado frecuentemente los entresijos de su composición, pero jamás ha querido desvelar la ubicación del puente: “No quiero que la gente lo busque”. Esta es la historia de ‘Under the bridge’. Una historia de drogas y soledad. También de esperanza.
Esta es la historia de ‘Under the bridge’. Una historia de drogas y soledad. También de esperanza.
‘Under the bridge’ es la canción más honesta de Red Hot Chili Peppers. Un himno que ha trascendido en el tiempo y se ha convertido en uno de los grandes éxitos de la banda californiana. Una conmovedora balada que catapultó al cuarteto de rock al ‘mainstream’. Pero esta particular oda a Los Ángeles, esconde una histórica trágica de adicciones y de soledad. Formó parte de su quinto LP, ‘Blood Sex Sugar Magik’, publicado en Septiembre de 1991.
Las drogas tuvieron un enorme impacto negativo en la banda. Tres años antes, en 1988, una sobredosis se había llevado al guitarrista original del grupo, Hillel Slovak (sustituido por John Frusciante). Durante gran parte de su carrera, Anthony Kiedis, Flea (bajista), John Frusciante (guitarrista) y Chad Smith (batería) lucharon con sus adicciones. Pero fue en ‘Under the bridge’, cuando el líder de la formación se abrió en canal y expuso el dolor y la angustia que le causaban su dependencia de la heroína.
Y también la soledad. “La soledad que sentía desencadena en mí recuerdos del tiempo con Ione (su ex novia) y cómo, teniendo a este bello ángel que me daba todo su amor, en lugar de aceptarlo, me iba al centro de la ciudad con esos jodidos gánsteres a drogarme debajo de un puente”, escribe Anthony en su libro de memorias ‘Scar Tissues’. El cantante habla de todo lo que perdió durante esos años, muy especialmente su relación con la actriz Ione Sky. “Es duro creer que no hay nadie ahí. Es duro creer que estoy solo”, canta en ‘Under the bridge’.
El momento del que surgió la estremecedora balada procede de una experiencia muy triste. Anthony Kiedis llegó al estudio y encontró a Frusciante y a Flea muy colocados… no se daban cuenta de nada. Es una escena que difícilmente olvidará. Esa noche cogió el coche y, conduciendo hacia casa, empezó a cantar sobre sus sentimientos de soledad y sobre cómo las drogas habían afectado tan negativamente en sus vínculos con los que más amaba. En ese momento, después de luchar con sus dependencias, había conseguido mantenerse ‘limpio’ (le duró unos tres años). Estaba distanciado de sus compañeros, que continuaban consumiendo marihuana. Kiedis pensaba que Frusciante, “ya no estaba en este mundo”.
Fue su productor, Rick Rubin, quien, repasando el nuevo material de Anthony Kiedis, buscando entre sus letras, se fijó en un poema titulado ‘Under the bridge’. Le conmovió al instante e imploró a su autor que se lo mostrara al resto. Anthony era reticente. Pensaba que era una canción demasiado blanda para los Peppers. Pero, finalmente, accedió. Y después de cantar la letra ante sus compañeros, el líder recuerda que ellos, simplemente, “se levantaron, se dirigieron hacia sus instrumentos y empezaron a buscar el ritmo y los acordes que guitarra que encajaran”.
Pero el puente, ¿existe realmente?. Es en la famosa estrofa final en la que, literalmente, se describe el proceso de inyectarse heroína ‘bajo el puente del centro de la ciudad’. Kiedis explica en sus memorias: “A lo que se refería ahí era a la época en la que yo no tenía nada en la vida, no tenía amigos, ni sitio donde vivir, no tenía coche o relación alguna con mi familia”. Y continuaba explicando, "Todo lo que tenía entonces era ese contacto llamado Mario. Él era de la mafia mexicana, exconvicto. Él y yo paseábamos por las calles del centro de Los Ángeles buscando nuestro siguiente chute. Y una tarde en particular, en pleno verano, hacía mucho calor y llevaba días en pie, y encontramos lo que estábamos buscando y fuimos a ese puente que estaba en el centro de Los Ángeles, en este gueto”.
Era un puente sobre una autopista, “un pequeño pasadizo que tenías que atravesar, y solo a ciertos miembros de su banda mexicana, que eran todos exconvictos, se les permitía ir allí. La razón por la que me dejaron entrar es porque este tipo, Mario, dijo que estaba saliendo con su hermana. Era mentira. Lo dijo solo para que pudiéramos acceder ahí”. Y añade en su biografía: “Y eso siempre lo tengo clavado en mi cerebro como un momento crítico en mi vida”.
Kiedis nunca rebeló la ubicación exacta del puente. En una entrevista con la revista Rolling Stone de 1992, el cantante se negó a divulgar su localización cuando se lo preguntaron: “Está en el centro de la ciudad… pero no es importante. No quiero que la gente lo busque”. Cuando la revista ‘Vulture’ contactó con el mánager de la banda, igualmente rechazó comentar la posible situación del puente. La publicación, basándose en entrevistas y en la autobiografía de Kiedis, emprendió la búsqueda. Finalmente, cita un pequeño túnel bajo Witshire Boulevar en MarcArthur Park como posible. A día de hoy, nadie, excepto Kiedis, conoce el ‘misterioso’ puente angelino. Hay quien asegura que no existe.
Un par de anécdotas más. Después de que la canción fuera grabada, Rick Rubin pensó que ese final apoteósico podría mejorar añadiendo a un gran grupo de cantantes. Y Frusciante invitó a su madre, Gail, y a su amiga, para que participaran en los coros. Una más. Después de elegir ‘Give it away’ como primer single de ‘Blood sugar sex magik ‘, los ejecutivos de la compañía dudaban del siguiente single y decidieron ir a un concierto de RHCP. Cuando iban a tocar ‘Under the bridge’ Kiedis se olvidó de cómo empezaba. Sorprendentemente, el público empezó a cantar el tema. Después del show, se disculpó con los ejecutivos, pero ellos estaban encantados. Si la gente se sabía tan bien la canción, sería el siguiente single.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop