Bajocero X presenta un nuevo 'yo' en 'El ∞ Ciervo', la introducción de su primer disco

Hace unos días Bajocero X sorprendía en sus redes sociales al publicar un adelanto de El ∞ Ciervo, la canción que acaba de presentar. Este anticipo llegaba como una señal de que nada sería como antes, y al conocer la canción al completo nos hemos dado cuenta de que cualquier cosa que nos esperábamos de él, se ha quedado corta en comparación con el resultado que hemos podido ver en este tema.

Cuando el artista nos tenía acostumbrados al nightcore, al reggaeton y a los géneros que se acercan más a la escena urbana, de repente nos sorprende con unos cantos gregorianos que sirven como anticipo de lo que será su primer gran proyecto discográfico. Bajocero X ha roto los esquemas que había establecido hasta ahora en su trayectoria musical y presenta un nuevo 'yo' en su trabajo más grande hasta la fecha.

Este preámbulo se vuelve único desde el primer momento. Como hemos dicho, las voces que escuchamos en los primeros segundos de la canción son las de un canto gregoriano, al que sucede el principal verso pronunciado por el cantante, que resulta ser una referencia al Salmo 42: "Como el ciervo desea los manantiales de agua, así te desea mi alma". Con estas palabras se resume a la perfección todo lo que escuchamos a continuación en esta composición tan sensible.

¿Una palabra con la que definir 'El ∞ Ciervo'? Crudeza

Una mezcla de amor, dificultad y esperanza es lo que encontramos en El ∞ Ciervo, un tema que te envuelve de principio a fin en una historia que trata tiempos difíciles y te hace conectar con la angustia del protagonista, pero a medida que avanzan las estrofas encontramos la esperanza y la confianza en Dios de quien canta estas palabras.

De este modo, Bajocero X, con un sonido totalmente distinto y muy crudo, refleja a la perfección en cada uno de los detalles de su voz, melodía y videoclip, la esencia de esta pieza bíblica. Ese llamado a confiar en Dios en medio de la adversidad, que te acerca a tu propia espiritualidad, a todo aquello en lo que crees, sea un Dios o no, y de una manera extraordinaria te envuelve en una atmósfera difícil de crear, pero que, sorprendentemente, Daniel consigue hacer que imagines poco a poco.

Definitivamente, el artista ha puesto las cartas sobre la mesa tras encontrar su nueva estética y su nueva sonoridad, arriesgando todo en una propuesta hecha a medida y para la que hay que estar dispuesto a dejarse sorprender. Esta ha sido apenas la primera página de la nueva historia de Bajocero X, un prólogo a su era más sincera y apasionante.