Melody se pasa por Anda Ya! y hace frente a las críticas: “Tengo mis partes raciales que traen un poco de conflicto, pero no voy a cambiarlas”

Melody ha desayunado hoy en Anda Ya! para dar los últimos detalles sobre su actuación en Eurovisión antes de poner rumbo a Basilea. Llegaba a los estudios de LOS40 a primera hora de la mañana, vestida como una auténtica diva con un vestido muy artístico que nos recordaba a Van Gogh, el pintor, no el grupo de la discordia estos días. Ya queda poco más de un mes para ese día para el que lleva preparándose tanto tras ganar Benidorm Fest.

“Estamos ahí, todavía quedan preparativos, quedan cosas pendientes, pero también hay sus nervios”, decía sobre cómo se siente ahora mismo. Pero conserva ese buen humor y optimismo que la caracteriza. Hasta Jason Momoa ha caído rendido ante ella.

Una de las inquietudes de los eurofans es cómo va a ser la puesta en escena. Asegura que no va a ser igual a lo que ya hemos visto. “Sí te puede decir que va a haber varias sorpresas, no va a ser una única cosa, van a pasar varias cosas”, asegura sobre el tema, “el escenario de Eurovisión es una pasada, y ese día, una torpeza no intentar aprovecharse. Es una locura las luces que hay y eso”.

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También escuchaba el mensaje que Benita Joao le dejó hace tiempo para ganar Eurovisión. Un ritual que consiste en ponerse laurel en los zapatos con el símbolo del infinito y un poquito de canela tras la oreja. Aunque no ha confirmado si lo hará o no.

Haciendo frente a las críticas

Aunque va subiendo en las casas de apuestas, también ha tenido que hacer frente a algunas críticas por Esa Diva. “Entiendo que no a todo el mundo se le puede gustar, lo entiendo perfectamente. Sí que es verdad que hago hincapié en que no estoy de acuerdo en las críticas destructivas”, valoraba.

“El público me quiere mucho, me está tratando muy bien. Pero entiendo que soy una artista que tengo mis peculiaridades y que tengo mis partes raciales que traen un poco de conflicto, pero desde aquí, quiero comentar que no voy a cambiarlas”, aseguraba sobre su intención de ignorar a todos aquellos que no acaban de ver bien su movimiento de coleta.

Boscá lo tiene claro, no hay ningún hogar en España que no fuera capaz de cantar Esa Diva y eso ya es una victoria. Ya ha sacado hasta tres versiones de su canción y su ilusión y ganas no dejan de crecer. No hay más que verla en el baile que se ha marcado con nuestros locutores.

Con esta alegría pone rumbo a Eurovisión y le deseamos todo lo mejor.