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Nirvana vuelve a ganar el juicio por la portada de 'Nevermind'

Un juez desestima la demanda interpuesta por Spencer Elden por presunta "pornografía infantil"

Imagen de una exhibicion de objetos de Nevermind de Nirvana / Samir Hussein

Nirvana no tendrá que indemnizar al bebé desnudo de su portada 'Nevermind' después de que una sentencia judicial haya fallado en su favor desestimando las acusaciones de "pornografía infantil" que violaban las leyes federales al mostrar al menor en una foto "sexualmente provocativa".

Spencer Elden, que ahora tiene 35 años presentó la primera demanda contra la formación estadounidense liderada por Kurt Cobain en 2021. Sin embargo, un año después se encontró con la negativa del juez Olguin en juzgar el caso ya que los presuntos delitos habían prescrito (en el 30 aniversario de su publicación). Pero el 'bebé de Nirvana' apeló y un tribunal consideró que la causa debía volver a un juzgado de primera instancia para resolverse.

Y eso es lo que ha sucedido en este 2025 después de una larga espera legal. El dictamen no deja lugar a dudas y aunque reconoce la desnudez del protagonista deja claro que no había una intención de violentar su intimidad sino una crítica al capitalismo como argumento principal de Nevermind de Nirvana.

"Ni la pose, el punto focal, la ambientación ni el contexto general sugieren que la portada del álbum presente conducta sexualmente explícita. Esta imagen —una imagen que se asemeja más a una foto familiar de un niño desnudo bañándose— es claramente insuficiente para fundamentar un hallazgo de pornografía infantil. La desnudez debe estar acompañada de otras circunstancias que hagan que la representación visual sea lasciva o sexualmente provocativa" se puede leer en la sentencia a la que ha tenido acceso Billboard.

De hecho, el juzgado asegura que la primera reacción del demandante al enterarse de que fue el protagonista de la portada de ese famoso disco no fue de indignación o de haber sufrido una violación de su intimidad sino de protagonismo ya que llegó a vender ejemplares firmados de esa imagen refiriéndose a sí mismo como "el bebé Nirvana".

"Durante muchos años, el demandante ha disfrutado y se ha beneficiado económicamente de su participación en la portada del álbum. Sus acciones relacionadas con el álbum a lo largo del tiempo son difíciles de conciliar con sus argumentos de que la portada constituye pornografía infantil y que sufrió graves daños como consecuencia" se lee en la sentencia.

El abogado de Nirvana, Bert H. Deixler, se ha felicitado por la resolución: "Estamos encantados de que el tribunal haya puesto fin a este caso sin fundamento y haya liberado a nuestros clientes creativos del estigma de las acusaciones falsas".