Piloto fantasma es nuestro cómic de la semana

Como cada siete días ahí va nuestra recomendación sobre el sector

Los reinicios de Marvel de la última temporada han dado lugar a nuevas presentaciones para personajes ya conocidos. Hemos visto ya el resurgir de algunos de ellos; el estilo clásico de Caballero luna o el acabado especial de Puño de Hierro, ambos (podríamos decir) de "segunda fila" en el universo Marvel, pero ambos con reinicios de calidad más que merecida para las posibilidades de sus historias. Hoy saltan chispas con este tercer invitado a los "reinicios" de Marvel. El comic de esta semana es: Piloto Fantasma.

Nunca me había interesado demasiado por Motorista Fantasma, había leído alguna cosa suelta y me topé con la primera peli de Nicolas Cage en su día; es increíble como un solo hombre puede conseguir que te alejes de un personaje. El caso es que no tenía demasiado conocimiento de su historia, más allá de la perpetua búsqueda de venganza. Por ese frente las cosas siguen más o menos igual; Robbie Reyes es un chico joven y responsable. Es aplicado en clase, muy eficiente en el taller en el que trabaja y saca adelante a su hermano pequeño postrado en una silla de ruedas.

Su único delito es interesarse por una carrera callejera para conseguir dinero para comprar una nueva silla de ruedas a su hermano tras un encuentro desagradable con unos pandilleros. En ese evento, Robbie utiliza un coche del taller en el que trabaja, un coche muy especial que le convierte en objetivo de gente muy peligrosa.

Robbie acaba perdiendo la vida en esa carrera ilegal, pero el espíritu del Piloto Fantasma lo trae de vuelta para que le sirva como cuerpo físico en su historia de venganza. A partir de ese momento, Robbie se convertirá en un super-héroe de los que hace daño de verdad.

No mentiremos. No tenía intención de organizar un re-encuentro con este personaje, pero el dibujo de Tradd Moore me ha obligado a hacerlo. Conocí a Moore en El Talento de Luther Strode, un lectura diferente (mucho más indie) dedicada a la acción desmedida y a contar la sangre por litros, y me ha encantado ver el salto del artista al flujo "mainstream" del sector.

Con un estilo cada vez más personal, Moore aporta una frescura especial a este Piloto Fantasma. Su trabajo de línea, tremendamente cartoon, consigue dar movimiento a cada viñeta de forma sublime, trabajando el humo de cada derrape, de cada llamarada... dando consistencia, dirección y recorrido. Cada escena de acción se convierte en un trabajo de virtuosismo para llegar a la mejor narración visual posible.

Puede que el comienzo de la historia de Piloto Fantasma no haya tenido tanta fortuna como el de Caballero Luna o Puño de hierro; son historias difíciles de superar y, aunque muy correcta en su guión, Piloto Fantasma no profundiza todo lo que nos gustaría en la historia del personaje. Cierto es, también, que la historia no ha hecho más que empezar y que sólo el dibujo de Tradd Moore es capaz de vender de sobra los dos primeros volúmenes de la serie.