Todos conocemos 'Bohemian Rhapsody' de Queen, pero ¿sabemos qué significa realmente?

Bohemian Rhapsody es, sin duda, una de las canciones más célebres de Queen, la banda inglesa que se convirtió en un referente obligado del rock de los años 80. De la mano de Freddie Mercury, a través de esta pieza, el grupo dio muestra de una originalidad y talento musicales inéditos. Estuvo nueve semanas en la cima de las listas de éxitos cuando salió, en 1975, pero volvió al número uno después de la muerte del cantante en 1991. Pero, sin duda, el título más destacado, es el que ha logrado actualmente, pues se ha convertido en la canción más escuchada del siglo XX a través de las plataformas de streaming. No en vano, tanto el nombre de la canción como el del líder de Queen forman parte de la lista de lo más buscado en Google en 2018.

Los ejecutivos se negaron que Bohemian Rhapsody fuera un sencillo del nuevo disco. Dijeron que solo sería posible si se hacía una edición a esos 5:55 minutos. La banda se negó en rotundo y se puso en contacto con DJ Kenny Everett, un muy influyente locutor que puso la canción catorce veces durante un fin de semana. La gente se preguntaba qué demonios era lo que escuchaban, aunque les encantaba. Abarrotaron las tiendas de discos para comprar el sencillo y pedían la canción sin parar en la radio.

El 24 de agosto de 1975 iniciaron la grabación en un estudio remoto de Gales y no terminaron hasta tres semanas después. La ópera necesitó toda una semana para que estuviera lista. Realmente nadie tenía ni idea de cómo sonaría la canción entera. Solo Freddie conocía el resultado, pues llevaba años con esa canción en su mente. Las sesiones de grabación fueron de diez y doce horas diarias. En aquella época fueron necesarias 180 grabaciones separadas. El productor Roy Thomas no estuvo seguro de la canción hasta que comenzó a editarse: "Realmente nadie sabía cómo iba a sonar cuando se juntaran los seis minutos. Estaba de pie en los controles y supe que estaba escuchando por primera vez una gran página en la historia".

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¿Qué hace tan especial a Bohemian Rhapsody? En buena medida, la mezcla inesperadamente armónica de múltiples influencias culturales que, a primera vista, podrían parecer ajenas entre sí. Ese rasgo se encuentra en el título de la canción, en su estructura y, por supuesto, en lo que dice su letra.

Muchas de las interpretaciones, más allá de su contenido, se centran en su estructura, la cual está cargada de significado. La canción se titula Bohemian Rhapsody, para empezar, precisamente porque es una rapsodia, una pieza musical formada por fragmentos de tono popular sin interrupción entre unos y otros. Se compone de seis secciones: se inicia con una introducción, sigue con una balada que da paso a un solo de guitarra, luego la ópera, el rock y el final. Una estructura inusual para en el mundo de la música y todavía más extraño al tratarse de una banda de rock.

Si bien es cierto que las piezas surgidas por la música clásica ya habían propiciado el nacimiento del rock sinfónico, nunca se había experimentado con semejante mezcla de géneros. A partir de entonces, comenzó a imitarse por otros músicos, incluso por Queen en Innuendo, pero nunca se consiguió un resultado similar.

Pero más allá de la extraña música, todavía hoy resulta incomprensible la letra. Freddie Mercury dijo en su momento que cada oyente debería escuchar y formar su propia opinión sobre la canción. Y así lo han hecho los fans. Brian May y Roger Taylor aseguran que se trata de un tema que muestra completamente la personalidad de Mercury, con algunas partes sin sentido. "Es una de esas canciones que tienen un aura de fantasía alrededor. Pienso que la gente debería simplemente escucharla, pensar en ella y luego formar su propia opinión acerca de lo que les dice... 'Bohemian Rhapsody' no salió de la nada", dijo el propio Freddie Mercury sobre el emblemático tema. En un documental de la BBC sobre el proceso de creación, Roger Taylor comentó sobre el verdadero significado de la canción que es "claramente de auto-exposición, con sólo unas pequeñas partes sin sentido en el medio".

Es una de esas canciones que tienen un aura de fantasía alrededor

Según una interpretación, la más extendida, la letra narra los demonios con los que lidia un asesino, otros aseguran que es una exposición del estado emocional de Freddie Mercury, quien quería terminar su relación con Mary Austin, atraído por los hombres. También hay quienes aseguran que la letra es una alusión a la frustración del autor por ser sacado de Zanzíbar cuando tenía 18 años...

La discusión se hizo viral en Twitter hace unos meses, cuando el escritor español Jorge Palazón usó la red social para detallar todos esos mitos que rodean a la canción. Para ello, usó un hilo en el que trata de dar respuesta al título de la canción, su duración e incluso el día elegido para ser estrenada: 31 de octubre.

Existe otra interpretación surgida después de una entrevista que el compositor Tim Rice, que trabajó junto a Mercury en su disco en solitario, concedió al periódico Daily Mail en 2015. En ella, defiende que el cantante usó la letra de la canción para confesar su homosexualidad. Asegura Rice que el fragmento "mamá, acabo de matar a un hombre. Le he puesto una pistola en la cabeza, he apretado el gatillo y ahora está muerto", es un símil con el que expresa cómo ha matado su antiguo yo, al que le gustaban las mujeres. “Había destruido al hombre que intentaba ser y ahora era él mismo, intentando vivir con el nuevo Freddie", concluye. Lesley-Ann Jones, biográfica del cantante, y Jim Hutton, la última pareja de Freddie, también apoyarían esta versión.