Rosalía reina en la segunda jornada del Bilbao BBK Live

Era el día del Bilbao BBK Live en el que resultaba imposible hacerse con una entrada. El cartel de sold out lucía gracias a reclamos como Rosalía, The Strokes, Suede o The Blaze. La cantante catalana ha conseguido en tiempo récord algo que resulta una proeza: que gente que nunca se hubiera planteado pisar un festival los disfrute como niños.

Pero la jornada arrancó muy lejos de los ritmos reguetoneros, aunque no tanto. Cecilio G se hizo con uno de los escenarios con el sol cayendo a plomo.El de Barcelona ofreció un concierto entero con sus canciones más conocidas sin separarse de una toalla que llevaba al cuello y su mochila.

Casi a la par salieron Karma y Joaco con su proyecto de Muévelokumbia. Ellos son Mueveloreina, pero ahora quieren explorar ritmos indígenas y fusionarlos con eléctronica como ya vinieran haciendo con su proyecto principal, una de las agrupaciones de trap con mayor conciencia social y con claros mensajes políticos. Y se atrevieron a plantar cara a The Strokes bien entrada la madrugada.

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A las once, como un reloj, salía al escenario Rosalía. La catalana no se salió del show que ha venido mostrando en la megagira de festivales que la ha llevado por todos y cada uno de los nacionales y los internacionales. Capaz de llevar a la intimidad a un recinto abarrotado con sus primeras composiciones y de llevar al extasis a esa misma audiencia con temazos como Aute Cuture.

Princess Nokia tomó el relevo con algo de retraso y un cuerpo de baile espectacular en un show que nos hizo recordar porque la de Nueva York es considerada uno de los referentes del trap más primigenio. Y nos recordó que este estilo puede evolucionar y mutar como muchos esperan de él.

The Strokes se hicieron un paseillo de la gloria por los temas tan recordados por todos los que gastaban zapatilla en los albores de la década pasada. Los de Julian Casablancas no se dejaron ni uno de los hits de Is this it en el tintero dando a todos los fans lo que más querían: Una buena dosis de nostalgia y buen rollo.

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The Blaze eran unos de los más esperados, también, de esta edición. Y no defraudaron. Los parisinos se recorrieron su Dancehall enterito e hicieron valer todas las alabanzas que su primer largo recogió el año pasado.

Y ninguna jornada en el Bilbao BBK Live puede terminar sin pasar por el Basoa. Anoche cerró la fiesta el inconmensurable Laurent Garnier con un set que parecía que no quería terminar nunca.