Amaia nos cuenta las claves del vídeo de ‘Nadie podría hacerlo’

Amaia acaba de lanzar nuevo tema y videoclip, Quedará en nuestra mente. Pero todavía tenemos en la retina las imágenes del anterior, Nadie podría hacerlo. Si en nuestra nueva sección de Así se hizo, la navarra nos contó las claves de cómo se compuso la canción, ahora le toca el turno al vídeo.

Realizado por RIEN, nos muestra una sucesión de imágenes en las que nos deja dos cosas claras: su apuesta por lo analógico y la naturalidad como seña de identidad. Ella misma nos ha contado las claves.

Reconoce que fue un videoclip más casero que el anterior. “El vídeo de El Relámpago tiene como mucha post producción detrás y este se grabó en una mañana”, asegura.

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Una de las cosas que primero llamó la atención de algunos fue el recurso de recurrir a imágenes de su infancia, momentos en familia donde no faltan las risas. “Me hacía ilusión que saliesen cosas de cuando era pequeña porque a mí siempre es algo que me ha gustado mucho, el paso del tiempo”, explica.

Momentos compartidos con sus hermanos en el apartamento en el que veraneaban en Hendaya o un baile con su padre en alguna comunión familiar, son algunos de esos recuerdos que han puesto imagen a Nadie podría hacerlo.

También es imposible no fijarse en las flores. Asegura que le gustan, que generan una imagen bonita aunque, reconoce que no tienen ningún simbolismo oculto.

Tampoco lo tiene el vestuario elegido. Es un conjunto de Paloma Wool que estrenó en su primer Primavera Sound y del que la diseñadora nos habló en su día. Los pendientes, son suyos y suele llevarlos habitualmente, no los escogió especialmente para el vídeo.

Y si hablamos de señas de identidad, otra es la del pelo en las axilas que tanto ha aplaudido el feminismo. “No me depilo porque no lo veo necesario, no me apetece básicamente. En mi persona lo tengo como bastante interiorizado y ni me acuerdo, pero tampoco busco ningún objetivo”, aclara sobre un tema que ha dado mucho que hablar.