Las giras que más revuelo han causado con su cancelación

No han sido pocas las veces en las que la cancelación de un concierto ha causado un gran revuelo entre el fandom y mediático. El último de ellos, fue el de Aitana del pasado fin de semana, para el cual ella misma comunicó el cambio de fecha. Por muchas y diferentes causas, lo importante ante estas situaciones es que se pueda encontrar el modo de resolver la situación con el menos número de perjudicados por ellos.

Los problemas de salud son, evidentemente, una de las razones de mayor peso para tener que posponer o cancelar una gira y, por desgracia, no son pocos los artistas que han tenido que pasar por esa situación. Desde Lady Gaga a Charlie Puth, así como la española Malú, quien se vio obligada a que suspender sus directos del Oxígeno Tour para enfrentarse a una cirugía de tobillo. También, entre los gajes del oficio, se encuentran las dolencias vocales, como las que obligaron a Adele en dos ocasiones, en 2011 y 2017 a posponer sus actuaciones. Una de las que peor lo pasó fue Shakira, en pleno Dorado World Tour, debido a los problemas que sufrió en las cuerdas vocales. Pero como de toda experiencia hay que sacar el lado positivo, ella volvió a los escenarios más fuerte que nunca y esta recuperación le ha servido para mostrar sus shows más espectaculares en su próxima película documental.

A día de hoy, Selena Gómez se muestra de lo más saludable y a punto de estrenar nuevo material, algo por lo que nos alegramos muchísimo. Pero, tiempo atrás, ella también se vio obligada a cancelar las actuaciones europeas de su Revival Tour por motivos de salud relacionados con el lupus que sufre: ansiedad, ataque de pánico y depresión. Otra cantante que tampoco pudo seguir adelante con una de sus giras fue Leona Lewis, que no se encontraba con suficiente ánimo tras su ruptura sentimental con su pareja.

Los fans de Metallica tampoco están muy contentos con la banda de rock, aunque la mayoría se han mostrado comprensivos con James Hetfield. El vocalista y líder del grupo se ha reencontrado con sus problemas relacionados con adicciones y se encuentra en pleno proceso de rehabilitación, razón por la que Australia y Nueva Zelanda tendrán que esperar para ver en directo al cuarteto.

En otras ocasiones las explicaciones han brillado por su ausencia y los fans se han tenido que conformar con un "circunstancias imprevistas" como motivo de la suspensión del espectáculo. Ese justamente fue el motivo que alegó Justin Bieber cuando dejó a medias su Purpose World Tour. Al igual que los británicos Coldplay en 2013, cuando dejaron a un lado su gira por Latinoamérica sin mayor excusa que los dichos imprevistos sin especificar.

Entre las más sonadas y comprensibles al mismo tiempo, se encontraron las cancelaciones que tuvo que llevar a cabo Ariana Grande en algunas ciudades europeas tras los ataques terroristas ocurridos en Manchester durante su Dangerous Woman Tour. Hechos lamentables que han continuado persiguiendo el equilibrio mental de la cantante tiempo después de los hechos, algo que ella nunca ha intentado esconder.

Pero, no todas las cancelaciones son por un motivo triste, al menos para las estrellas. Ese fue el caso de Elton John que canceló dos conciertos por un compromiso de importancia "real": haber sido invitado a la boda del Príncipe Harry y Meghan Markle. Muy comprensivos y alegres se mostraron también todos los seguidores de Janet Jackson cuando el motivo por el que se vio obligada a suspender sus conciertos no era menos que su propio embarazo.