Especial
Bob Dylan: la intensa y oculta vida privada del músico solitario
La vida del músico estadounidense es todo un misterio, entre hijos no reconocidos y bodas secretas
Hace tan solo unos días, recibimos una sorprendente noticia que tenía que ver con la música como negocio, su lado más empresarial. Bob Dylan cerró un trato histórico con la discográfica Universal para vender su catálogo musical completo. La dimensión de la decisión del músico se entiende mejor si tenemos en cuenta que, desde 1962, siempre ha sido guardián de su creatividad, conservando los derechos de sus canciones en estas seis décadas que lleva en activo.
A sus casi 80 años, poco sabemos sobre la vida privada de Dylan, y después de esta decisión muchos podrían pensar que no tiene descendencia, o que no quiere que sus hijos reciban nada después de su muerte. Una vida tan hermética como la del estadounidense puede llevar a muchas interpretaciones. Sin embargo, ahora sabemos que no es así.
Según Howard Sounes, uno de los biógrafos más importantes del músico, "está dejando todos sus asuntos en orden antes de morir", afirma en el diario Daily Mail. "Tiene una familia numerosa a la que está muy unido. No quería dejarles la tarea de manejar su catálogo de canciones, que es un negocio complejo en el que hay que tomar cientos de decisiones. Vender los derechos a Universal le permite pasar a sus muchos hijos y nietos un importante capital en efectivo en lugar de un dolor de cabeza".
Son esos hijos y nietos los que siempre han sido un misterio para sus seguidores y el público en general. El músico se ha mostrado más que celoso de su intimidad. La primera de sus parejas serias fue una de las que más le marcó musicalmente. Conoció a Joan Báez en un festival de música folk en Nueva York en 1961, una cantautora activista que lo introdujo en los circuitos culturales de la época. Rápidamente se convirtieron en una de las parejas más famosas de la juventud más inconformista. Sin embargo, el despegue de la carrera de Dylan y las incipientes giras hicieron que la relación terminara cuatro años después.
¿Solo? tres mujeres en su vida
El primer matrimonio del artista llegaría en 1965, con una mujer con la que ya comenzó a citarse antes de terminar la anterior. Con la modelo Sara Lownds tuvo un hijo y adoptó una más de una relación anterior. Robert Shelton, biógrafo de Dylan, la describió como "un espíritu gitano, sabia para su edad, bien informada acerca de la magia, el folclore y la sabiduría tradicional". Después llegó a tener tres descendientes más, y, a pesar de las aventuras amorosas del músico, fue él el que acabó rompiendo su matrimonio.
Según cuentan, una mañana Sara se encontró en su propia cocina a Dylan y sus cinco hijos desayunando con su nueva conquista: Malka. En 1975 se separaron para siempre, y ella alegó malos tratos en un juicio que le costó al cantante unos 36 millones de dólares y perder la custodia de sus hijos. A cambio, ella acordó no hablar nunca de la vida privada de la pareja.
Años más tarde, en 1978, el músico contrató a una vocalista que ya llevaba tiempo trabajando con Stevie Wonder llamada Carol Dennis. Compartieron escenarios, amor y música durante ocho años hasta que se casaron y tuvieron una hija. Todo ello fue un absoluto secreto hasta que se reveló años después en una biografía no autorizada. Dylan y Dennis se divorciaron en términos amistosos en 1992 y el cantante siguió ocupándose de la hija y pasando una pensión a la madre.
Recapitulando, Bob Dylan tenía en aquella época cinco hijos biológicos y una adoptada. Sin embargo, después del despecho de su road manager, Susan Ross, esta hizo público a finales de los años noventa que Dylan tuvo relaciones sentimentales con varias coristas más y que tenía varios hijos más no reconocidos. En total, se le atribuían diez descendientes. Los rumores no han dejado de crecer, pero nunca ha habido una demanda de paternidad, quizá porque el músico cuida económicamente de ellos.
El legendario compositor volvió después de ocho años sin nuevas canciones con Rough and Rowdy Days, disco que sorprendió a todos sus fans con temas como Murder Most Foul, la canción más larga de la historia de Dylan, donde pudimos comprobar que su poder de composición sigue intacto.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic