Toñi Moreno sobre la lactancia materna: “Sabía que iba a ser muy criticada si contaba la verdad”

Pero lo ha hecho en su libro sobre maternidad pasados los 40

Toñi Moreno habla sin tapujos de su maternidad. / Europa Press Entertainment/Europa Press via Getty Images

Toñi Moreno comenzó el 2020 con la llegada de su tan esperada y deseada primera hija. Lola le ha cambiado la vida a sus 46 años y ella, encantada. Eso sí, reconoce que ha sido duro y lo describe en su libro sobre la maternidad pasados los 40 en el que cuenta su experiencia para ayudar a las que están en su mismo lugar.

Un libro en el que habla de su embarazo por ovodonación, de sus dos abortos, de sus complicaciones en el embarazo y parto y sobre lo duro que está siendo el posparto. Pero pese a todo eso, un libro en el que deja claro que ser madre ha sido una de las mejores cosas que ha hecho y que repetiría mil veces más.

Entre los temas que toca está el de la lactancia materna. Ella optó por eludirla y alimentar a su pequeña con biberón. “Sabía que iba a ser muy criticada si contaba la verdad porque ahora parece que si no les das el pecho al niño eres una mala madre”, nos aseguraba en una entrevista.

Apostando por el biberón

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Fue una decisión personal de la que no se arrepiente. “A mí me hubiera encantado darle el pecho a mi hija, pero emocionalmente no estaba para darle el pecho y, además, lo sabía. Había visto cómo a mi hermana le había costado muchísimo darle el pecho al niño. Para darle el pecho a tu hijo tienes que estar bien para que la leche tenga calidad, para que el niño esté bien y tú no estés nerviosa. Es verdad que debe ser algo maravilloso, pero yo no estaba bien”, confesaba.

Tras dar a luz, la periodista pasó una semana de depresión postparto que le hizo tomar esta decisión. “Para mí lo prioritario era recuperarme para estar bien para mi hija y sabía que estaba como en el borde de romperme y dije, ‘mira, le voy a dar el biberón’. Y menos mal, mi hija se ha criado super sana. Se está poniendo mala ahora que va a la guardería, pero el primer invierno no se ha puesto mala, todo lo contrario, cuatro kilos y medio, perfecta… he tenido mucha suerte en eso”, relataba.

Depresión postparto

Aquellos primeros momentos junto a Lola no fueron fáciles. Desmitifica ese flechazo madre hija, que ella no sintió. “En la primera semana que no podía parar de llorar, mi ginecóloga me dijo, ‘¿tienes con quién dejar a la niña?’. Yo le dije, ‘sí, tengo una red familiar, mis hermanas, tengo gente que me ayuda’. Me dijo, ‘que te la cuiden durante cuatro o cinco noches y tú tómate un diazepam y duerme que, lo que tienes ahora mismo, es un cansancio y un agotamiento que es por lo que tú no puedes parar de llorar’. Y así hice. Esa semana fue nueva para mí. Me acostaba, me tomaba la pastilla y dormía doce horas y por la mañana me encargaba de la niña y así me fui curando poco a poco”, recordaba sobre aquellos primeros días.

Eso sí, confiesa que, para compensar, ahora se ha obsesionado con la comida ecológica y cocina una vez a la semana para darle lo mejor a su hija.

Cristina Zavala

Periodista enamorada de todo el entretenimiento....