Día del Libro: Cuentos, tebeos y cómics, el regalo perfecto para aficionar a la lectura a los más pequeños
Hasta luego a las pantallas y hola a mundos infinitos en su imaginación
Cuentos, tebeos y cómics, para incentivar a lxs pequeñxs de la casa a leer / Sollina Images / Getty Images
Este 23 de abril no es solo Sant Jordi o el Día Internacional del Libro sino también puede ser el día que los más pequeños de la casa empiecen a descubrir su pasión por la lectura. Una manera perfecta de decir 'hasta luego' a las pantallas que monopolizan nuestras vidas y decirle hola a mundos infinitos en la imaginación de niños y niñas. Cuentos, tebeos y cómics son el regalo perfecto para este viernes.
El cómic está viviendo actualmente una segunda edad de oro gracias a las productoras de cine, que en los últimos años han apostado por películas basadas en este género literario, y que se han convertido en grandes éxitos de taquilla. Un fenómeno particularmente notable en Hollywood y que también ha tenido cabida en nuestro país de la mano de populares dibujantes de nuestro país.
La compra de cómics puede ir desde un pequeño hobby hasta el coleccionismo más bestial y también varía enormemente el coste de ambas tendencias. Para los más pequeños de la casa lo mejor es empezar poco a poco con cómics educativos para, a medida que vayan creciendo, ir dando paso a los héroes y a otros géneros.
LOS40
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Aunque sin lugar a duda el paso previo antes de los cómics podrían ser los cuentos o los tebeos. Los primeros son un objeto que enamora a los bebés casi desde que nacen. Hay auténticos best-sellers del género contemporáneo como El pollo Pepe, El Monstruo de Colores, El Grúfalo, A qué sabe la luna... además de los clásicos del imaginario colectivo de Hans Christian Andersen.
Los tebeos, un género literario 'made in Spain'
SuperLópez, Mortadelo y Filemón o Anacleto Agente Secreto son algunos de los cómics españoles o tebeos que han triunfado a nivel de ventas de nuestro país. Todo marcado por un humor y costumbrismo tan particular que se convirtió en un fenómeno y vivió su edad de oro entre los años cuarenta y mediados de los ochenta gracias a la Escuela Bruguera, un conjunto de historietistas españoles que se dedicaron al cómic de humor de la mano de la editorial.
Recientemente, uno de sus miembros, Francisco Ibáñez ha sido nominado al Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades. Una candidatura surgida de un grupo de seguidores a través de las redes sociales, pero que ya ha logrado sumar los apoyos del Ateneo de Madrid y una treintena de miembros del Parlamento Europeo, quienes afirman que este reconocimiento al catalán supondría una reivindicación del oficio de historietista.
Los tebeos fomentan el hábito de la lectura. Es el mejor medio para iniciarse en el hábito de la lectura. La narrativa visual permite acercarnos a la literatura de un modo ágil, divertido y atractivo. Desarrolla sus capacidades creativas y comprensivas. Gracias a sus historias y personajes, los tebeos permiten desarrollar nuestra imaginación y abren las puertas a crear y desarrollar nuevas aventuras. Supone un primer acercamiento al arte. Frente a las pantallas, el tebeo es una primera aproximación activa al arte. Un tebeo se agarra, se ojea, se huele y permite acceder a un nuevo estímulo.
Es un género intergeneracional. Más de 60 años han cumplido Mortadelo y Filemón, pero el tebeo se retrotrae a comienzos del s. XX, lo que supone que cinco generaciones han crecido leyendo las mismas historietas y disfrutado de los mismos personajes. Promueven el aprendizaje de diferentes y diversas temáticas. El tebeo es un género polifacético que permite adentrarse en temas tan variados como la historia, la cultura, pasando por la ciencia y los valores éticos y sociales, y permiten abrir a los niños hacia nuevos ámbitos de interés.
Para muchos el mayor historietista de la historia de España, Ibáñez está detrás de reconocidas historias cortas como 13, Rue del Percebe o Rompetechos. Gracias a sus tebeos, muchos niños y adultos adquirieron el hábito de lectura en España.
