Britney Spears no sabe si volverá a subir a un escenario

La princesa del pop vuelve a ser noticia. Se ha hablado mucho de su situación personal, de la tutela legal que gestiona su padre y de los problemas mentales que ha sufrido. Todos estos condicionantes han propiciado que Britney Spears lleve años alejada de los escenarios y del mundo de la música. La cantante continúa en contacto con sus fans a través de las redes sociales, especialmente con Instagram. Allí se comunica con sus seguidores y comparte vídeos de sus coreografías. Es a través de este medio con el que ha lanzado una preocupante respuesta para todo el que siga su música.

La artista ha reconocido que "no tiene ni idea" de dónde se encuentra ahora laboralmente. Después de dos años y medio de una pausa laboral que ya podemos considerar indefinida, considera que su regreso sigue en el aire. "¿Estoy lista para volver a subir al escenario? ¿Volveré a subir al escenario? ¿Volveré a subir al escenario alguna vez? No tengo idea", contesta Britney a las preguntas que sus seguidores se hacen.

"Me estoy divirtiendo en este momento, estoy en una transición en mi vida y me estoy divirtiendo, así que eso es todo", ha dicho con rotundidad. Con este mensaje sigue manteniendo las dudas acerca de su futuro, después de un turbulento año en el que ha trascendido la batalla judicial que tiene con su padre por la tutela legal. Todo ello propició el surgimiento del movimiento #FreeBritney, a través del cual los seguidores de la artista piden que vuelva a recuperar su capacidad de decisión.

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Britney Spears lleva desde 2008 viviendo bajo la tutela legal de su padre. Hace tres años, la salud de la artista empeoró, y tuvo que ser ingresada por tercera vez en un centro psiquiátrico. Para la prensa siempre trascendió que sufrió una crisis nerviosa, pero las teorías conspirativas no han dejado de sucederse, y muchas apuntan a su padre como principal culpable de este tipo de acciones. Hace solo unos meses, el tribunal retomó su caso para que la tutela le fuera devuelta, y ahí es donde la propia Britney amenazó con dejar de cantar si la situación no mejoraba.

Han sido ya 13 años los que el progenitor lleva ejerciendo el control sobre las finanzas y el patrimonio de la cantante, de forma que ella no puede tomar decisiones que atañen a su carrera artística. El pasado febrero, la justicia le negó la potestad absoluta sobre los bienes de su hija, y el próximo 23 de junio, previsiblemente, la cantante hablará en sede judicial por primera vez sobre su custodia.