Última hora
Isasaweis, la influencer a la que siguen Chenoa o Lucía Rivera, perdió 20 kg y cuenta cómo lo hizo sin dietas
“Recibimos demasiada información contradictoria y nos vuelven un poquito locos”
Isasaweis se metió de lleno en las redes sociales en 2009 y poco a poco ha ido convirtiéndose en una de las influencers de nutrición y estilo de vida más destacadas de nuestro país. Este 15 de septiembre publica Come genial y no hagas dieta nunca más, un libro en el que nos propone un método para estar en forma y delgados. Comparte una buena colección de recetas “con las que perdí 20 kg para siempre”.
Recetas accesibles para todos, no hace falta ser un cocinitas, y que se adaptan a la realidad de una vida con poco tiempo y ganas de cuidar lo que se come. Se aceptan congelados, tarros de conservas y cocinar para varios días. Un plan para comer bien, fácil de adaptar al ritmo acelerado del día a día de muchos.
Eso, junto al ejercicio, hacen posible alcanzar la estabilidad que ella buscaba cansada de hacer dieta tras dieta. Nos presenta la fórmula para ser felices y sentirnos bien.
Nuevo libro, agotada la primera edición antes de salir a la venta, ¿cuál es la clave?
Te recomendamos
Yo creo que la clave es la confianza que tiene realmente la gente porque si lo piensas, que se lo hayan comprado así sin verlo siquiera es de agradecer. Confío en que saben lo que están comprando porque me conocen y en que no les va a defraudar.
¿Para quién va dirigido?
Va dirigido para todo el mundo. Me decía un chico, ‘¿no será comida de dieta?’, porque si es eso no lo queremos comprar. Y no, es precisamente la comida de siempre. Es comida para el que se quiere cuidar y para el que quiere comer sano y comida para el que quiere comer de todo y hacer las cosas fáciles y prácticas, pero tener una alimentación equilibrada, un poquito de todo.
Abogas por una relación sana con la comida y el deporte… lo que siempre hemos escuchado. Parece fácil, pero, ¿por qué cuesta tanto conseguirlo?
Cuesta tanto porque yo creo que recibimos demasiada información contradictoria y nos vuelven un poquito locos. Por una parte, por el tipo de vida que llevamos, tenemos poco tiempo, muchas veces tiramos de lo fácil que creemos que es lo preparado y a veces es igual de fácil abrirse una conserva de verduras y saltearlas que te lleva lo mismo, está riquísimo y es mucho más sano. Pero movidos por todo eso y luego, por las modas, que de pronto está la dieta de que hay que comer todas las proteínas del mundo, luego la dieta de que las proteínas estás desterradas. Primero que las grasas son el demonio y luego que las grasas son lo peor. Yo creo que nos volvemos un poco locos y hemos acostumbrado a nuestros cuerpos a todo, a nada, a ahora esto y luego, no. Y al final nada funciona porque lo tenemos todo como descompensado. Se trata de comer con cabeza y ser conscientes de que lo importante es cuidarse y todos sabemos lo que nos sienta bien, lo que no es tan bueno
Das consejos para no tener que hacer dieta nunca más, algo que a muchos les supone un reto. Pero, ¿eso no es ir más allá de las dietas milagro?
Es huir de las dietas milagro. Es justo el concepto contrario. Las dietas al final son un conjunto de reglas y restricciones que no vas a poder mantener durante mucho tiempo, te limitan a nivel social, te tienen de mal humor, te restringen un montón de cosas y al final mantienes el esfuerzo un tiempo hasta que no aguantas más o consigues el objetivo que querías y estás deseando dejarlo para poder hacer una vida normal, tranquila y feliz. Entonces, las dietas están abocadas al fracaso. La forma de hacer que sea para siempre es hacer cosas que te permitan adaptarlo a tus circunstancias y tener una vida tranquila. En tu día a día, elegir lo que comes y cuando sales, disfrutar de lo que te pongan.
No contar calorías. No pesar las comidas. No preguntar qué sí o qué no puedes comer. No báscula cada semana. No quedarse con hambre… Los adictos a las dietas te estarán haciendo la ola, ¿lo tuyo es la antidieta?
Claro, por eso digo que esto es un salto de fe, porque tenemos muchas cosas inculcadas. Tenemos grabado a fuego no consumir a partir de ciertas horas hidratos porque son el demonio, que no se puede comer esto a tal hora, que no podemos combinar determinadas cosas, es terrible. En algún momento del libro hago esa pregunta, ‘tú ya llevas un tiempo haciendo todo eso siguiendo esas creencias y si estás aquí es porque no te funciona, así que, vamos a intentarlo de la otra forma’.
Tú perdiste 20 kg, ¿qué te llevó a querer perder peso?
No fue el hecho de perder peso. Me llevó el que quería, de una vez, dejar de estar todo el día de arriba para abajo. Yo hacía lo que mucha gente. Hacía una dieta y cuando perdía un montón de kilos y cuando ya me veía bien podía respirar y hacer una vida normal y eso me llevaba a recuperar otra vez todos esos kilos y vuelta a empezar, y así todo el día. Yo lo que quería era una estabilidad. Buscaba la tranquilidad y la felicidad. Yo conseguía perder peso y conseguía un cuerpo delgado, escurrido y sin ninguna forma y yo tenía ganas de verme más saludable, más formada, más fuerte, tener más energía y ahí entró la parte del deporte que modifiqué incluyendo pesas y la combinación de ambas cosas fue lo que me hizo mantenerme.
Tu propuesta es muy flexible, pero, ¿cuál es el límite infranqueable?
Que no lo dejes. Te va a costar un esfuerzo, que yo no digo que esto sea come lo que quieras y ya está. Tienes que ser consciente de que quieres una alimentación sana, un cuerpo sano y eso está en una alimentación con verduras, huevos, carne, pescado, frutas, legumbres y tienes que basarte en eso, pero no hay nada prohibido. Cuando tienes todo el día prohibido comer patatas fritas, el día que las comes, te comes el bol entero. En cambio, cuando tú puedes tomar patatas fritas cuando quieras, el día que las comes te sorprende porque te coges un puñadito y te quedas tan a gusto porque ya te comerás más mañana o la próxima semana cuando te vuelvan a apetecer. Esa es la clave.
Comer bien es una de las claves y tú nos propones una serie de receta con una filosofía muy real y práctica para un día a día normal.
Por ejemplo, el día de planear la comida para toda la semana que se puso tan de moda, que es práctico y fantástico. Pero a la hora de la verdad yo tengo mis cosillas. Yo sí que hago todas las semanas una crema de verduras que la suelo hacer con lo que me ha sobrado por la nevera y me sirve para aprovecharlo y para decir, ‘venga, ya tenemos una fuente de verduras para toda la semana’. La comemos y el resto lo congelo para otro día. A mí no me gusta que esté muy planificado porque la realidad es que nos atropelló el tiempo, no pude conocerle, cociné el triple y me ha sobrado y no lo voy a tirar. Procuro hacer dos o tres semanas a la receta y el resto tirar de algo a la plancha, un salteadito de algo congelado, unos tarros de verduras… esas cosas.
Hablas de tarros de conservas y congelados que para muchos sería algo tabú.
Estamos equivocados porque relacionamos lo procesado con lo malo, pero eso es en ciertas cosas. Unas verduras congeladas, que al final las han quitado de la mata, las han cortado y las han congelado y mantienen todas las propiedades, son igual de sanas o más muchas veces, que las verduras que vas a comprar al supermercado que cortaron de la mata hace más de una semana y han perdido todas las propiedades.
¿Qué ingrediente no encontraríamos nunca en tu nevera?
No por nada, simplemente porque creo que es el único alimento que no me gusta, lo he intentado comer, pero no hay manera, y son las ostras. No me gustan, pero el resto, todo. Están los fijos que siempre tengo, pero me gusta probar cosas nuevas.
En principio tus recetas parecen aptas para cualquier nivel de cocina, ¿no?
Desde el más principiante, porque son recetas muy sencillas, que puede cocinar todo el mundo, con ingredientes que encuentras en cualquier sitio, sin ningún tipo de utensilio o método de cocción raro. Muy facilitas y rápidas de hacer.
Por cierto, ahora que ha comenzado la nueva edición de MasterChef Celebrity, ¿no te han llamado nunca?
No, no me han llamado. No hay nada oficial, aunque sí que he tenido tentación de propuesta y me haría mucha ilusión la verdad.
¿Te verías con posibilidades?
Eso ya no lo sé, eso ya son palabras mayores. Pero aprender mucho y disfrutar mucho, seguro. Me haría mucha ilusión. Fíjate que me han ofrecido ir a otro tipo de realities y no me veo, pero en MasterChef, sí. Lo veo siempre, desde antes de que existiera aquí, lo veía en la televisión estadounidense.
Volviendo al tema de las rectas, hay que decir que muchas son muy factibles para familias con niños en casa, ¿no?
Sí. Me parece muy entendible eso de esconder a los niños las verduras entre la comida, que no se enteren y es una herramienta que, benditos padres que hacemos lo que podemos. Pero yo tengo otra técnica con mis hijos que es la del trato: Si lo probáis y no os gusta, entonces podéis no comerlo, pero lo tenéis que probar. Y luego, con los trucos de madre, que para eso los tenemos, les digo, ‘aunque bueno, igual os ha cambiado el gusto, porque cuando uno se hace mayor y empieza a ser más adulto, le empiezan a gustar otros sabores. Igual ahora que sois más mayores os gusta’. Y así lo voy consiguiendo.
Si aprendemos a comer bien, ¿podemos adelgazar sin hacer ejercicio?
Adelgazar, sí, sin ningún problema, pero yo no lo aconsejo porque realmente porque el ejercicio te ayuda a poner las cosas más en su sitio. Si adelgazas por dejar de comer te quedas escurrida, pero si adelgazas haciendo deporte será más bonito. Aparte, el ejercicio no es solo por adelgazar, aporta muchísimo más. Da energía, da fuerza, da hasta otra forma de ver los problemas. Hasta si has discutido con tu pareja, te vas a hacer ejercicio y vuelves y lo ves de otra forma.
¿Cuál es el ejercicio más efectivo?
El que te haga sentirte bien y disfrutar, eso es fundamental. Si no te gustan las alcachofas no te puedo poner a comer todo el día a alcachofas porque estás abocado a dejarlo. Por ejemplo, correr es un deporte que a nivel satisfacción post entrenamiento es brutal, pero es un deporte que implica muchísimo sacrificio. Si lo has intentado y no te gusta, no tires por ahí. Creo que es fundamental hacer pesas, un ejercicio de fuerza. Y luego el cardio está bien para mantener el corazón, pero lo puedes suplir con caminar que es maravilloso.
En tu faceta de influencer tienes mucha interacción con tus seguidores, tus piñones, ¿cuáles son las grandes dudas que te plantean en torno a estos temas?
Generalmente se va a lo puntual y yo creo que ahí está el error, no ir a lo global. Cosas tan específicas como si desayunas antes o después de hacer deporte. Yo les digo que es lo que me pide el cuerpo, me levanto, me tomo un café con leche, hago el entrenamiento que sea y luego llego a mi casa y desayuno tranquila. Y me preguntan si el café lo tomo con leche o sin leche, con cuánta leche…la gente cree que está en el milímetro la diferencia entre el éxito o no.
Entre esos seguidores hay muchas celebs. En tu IG te comentan desde Chenoa a Lucía Rivera o Sara Escudero, ¿con alguna de ellas has compartido alguna receta?
Sí, sí, además, algunas me han escrito por privado ‘quiero tu libro’. Hace unos días, una de las más conocidas me decía, ‘a ver si consigo estar tan estupenda como tú’. Alguna vez me han publicado en sus redes sociales cuando han hecho una receta mía. La gente es muy agradecida, muy normal y muy amable.
También te comenta Cristina Soria, la psicóloga de Sálvame, ¿en qué porcentaje influye lo psicológico en este proceso de cuidarse?
Yo creo que mucho. Yo a veces pregunto un deseo y el deseo más repetido con creces es ser feliz. Eso da mucho que pensar porque realmente la gente no se siente feliz con su vida y es lo único que desea. El verse mal y no cuidarte es la pescadilla que se muerde la cola.
Para acabar, ¿cuál dirías que tendría que ser el punto de partida para enfrentarse a un reto de este tipo?
Querer hacerlo, como muchas otras cosas en la vida. Muchas veces uno cree que no es capaz de hacerlo hasta que se pone. Nos tenemos que sentir obligados para conseguirlo. Necesitas una motivación fuerte. El que quiere lo consigue, pero requiere un trabajo y un sacrificio, como todo.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...