Robert Pattinson y Zoë Kravitz se parten de risa en ‘El Hormiguero’ viendo su transformación en otros actores
Tampoco faltan risas cuando desvelan las dificultades de sus trajes de Batman y Catwoman
Robbert Pattinson y Zoë Kravitz están de promo mundial por el estreno de The Batman, la película en la que él se convierte en el superhéroe murciélago y ella en Catwoman. Y como no podía ser de otra manera se han pasado a divertirse por El Hormiguero, aunque vía telemática.
Se lo han pasado muy bien, han explicado la complejidad de sus trajes y se han reído con Petancas y Barrancas que han querido emular a sus invitados vistiéndose de superhéroes. Las hormigas les han preparado una de sus secciones surrealistas: El Robertpattin-sonizador y el zoëkravitziador.
La cosa consistía en seleccionar la cara de algunos de los actores con los que han trabajado o que tienen algo que ver con ellos y mezclarlas con las suyas. Para superar el reto tenían que adivinar quiénes eran los escogidos antes de completarse la transformación.
Empieza el juego
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La primera en concursar fue Zoë que adivinó rápidamente que su cara iba a transformarse en la de Halle Berry, y no fue fácil porque las dos actrices se parecen mucho. También había cierto parecido entre Robert y el actor de su primera transformación: Daniel Radcliffe.
La siguiente transformación hizo que ambos actores se partieran de risa y es que Zoë no dudó en asegurar que verse convertida en Nicole Kidman era “como una pesadilla, tengo una cara rarísima”.
Zoë tuvo que ayudar a su compañero a adivinar su siguiente transformación. “Esta también es una pesadilla”, aseguró antes de desvelar que se trataba de Al Pacino. “La verdad es que no me parezco mucho”, decía el actor.
Quedaba ver a Zoë convertida en su amiga Jennifer Lawrence o Charlize Theron y a Robert en Willem Dafoe, que no le costó nada de tiempo adivinar, igual que Benicio del Toro. Sus pómulos y ojeras les delataron.
Ambos han demostrado que tienen un gran sentido del humor y que tienen muy buen ojo porque las han adivinado todas.
Sus trajes
Las risas también han sido recurrentes cuando han hablado de lo complicados que eran los trajes de sus personajes. “Me hacía falta un montón de gente para ponérmelo y quitármelo porque va super ajustado y, además, llevaba las uñas larguísimas y era dificilísimo manejarse y se rompía y se desgarraba, la verdad es que hacía falta un ejército, no era fácil. En la película parecía fácil, pero no”, aseguraba Zoë.
En cuanto a Robert ha confesado que “lo único complicado es cuando te tienes que meter por un pasillo estrecho y puedes entrar, pero no te puedes dar la vuelta. Y si vas al baño y demás, eso es muy complicado. Tenías que entrar ya de espaldas”.
Para que luego digan que los actores viven muy bien.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...