Chanel hace que el alcalde de Valencia pida que Eurovisión 2023 sea allí: “Cuestión de voluntad, no monetary”
La emoción y expectativas generadas por nuestra representante ha hecho que el político se haya anticipado
Chanel llegando a la alfombra turquesa de la Opening Ceremony. / Daniele Venturelli/WireImage
A falta de unos días para que la mami, la reina, la dura, una bugatti pise el escenario de la final de Eurovisión 2022, la emoción que España -y Europa- tiene por Chanel es increíble. Las apuestas ponen a la artista como quinta en la clasificación, mientras que muchos no dudan en pensar ya en una hipotética victoria. Y entre ellos, está Joan Ribó.
El alcalde de la ciudad de Valencia parece ser todo un eurofan declarado, o al menos seguidor de la intérprete de SloMo. Aunque si hay algo que le gusta más que Chanel es la ciudad en la que gobierna, a la cual ve como la candidata perfecta para recibir el festival el año que viene. Teniendo en cuenta que el Chanelazo que muchos vaticinan acabe siendo cierto y que sea nuestra representante la que acabe recogiendo el Micrótono de Cristal, claro.
Poniéndose en el mejor de los casos, el político tuiteaba un mensaje que dejaba clara su voluntad con respecto a un hipotético escenario en el que España gane el festival. Parece que las ganas de Ribó por acoger el festival van más allá de las evidentes ganancias que pueda generar, y así lo ha demostrado. El mensaje, escrito en valenciano, dice lo siguiente:
LOS40
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"¡Eurofans! Sábado por la mañana, playa; al mediodía, paella, por la noche, Eurovisión. ¿Qué os parece el plan para 2023? Si Chanel gana, propondré formalmente Valencia para que sea la ciudad que acoja la próxima edición", publicaba el alcalde, terminando con un jocoso "es una cuestión de voluntad, no monetary".
De este modo, y junto a una fotografía del micrófono de cristal -eso sí, de la edición celebrada en Lisboa en 2018-, Ribó ya ha dejado claro que quiere a Valencia como capital eurovisiva el año que viene, con Chanel otorgando el micrófono al futuro ganador. Eso sí, aunque su motivación sea de voluntad, lo cierto es que no hay duda de que el apartado monetary le irá muy bien: ya solo con el Benidorm Fest, la ciudad alicantina se vio altamente beneficiada al ser su sede oficial.
¿Llegará a tiempo?
Lo cierto es que, de ganar Chanel y otorgar la sede a la capital de la Comunidad, Ribó no tendrá demasiado tiempo para celebraciones. El alcalde tendrá que conseguir que proyecto del Valencia Arena pegue el sprint y esté listo para el año que viene, ya para muchos el recinto perfecto para la fiesta eurovisiva que aún se encuentra en obras.
Pero eso es cosa del futuro. De momento, ya solo queda contar los días para que Chanel haga ese dance break vestida de Palomo Spain que Europa espera con tantas ganas, y que ya la coloca como una de las grandes favoritas del certamen de este año. ¿Quedará primera -nunca secondary- y España se pondrá manos a la obra? Habrá que esperar aún unos pocos días para verlo.
