Belén Esteban se rompe en su vuelta a ‘Sálvame’: “Me han puesto 20 tornillos y dos placas”
Reaparece por teléfono y cuenta en primera persona todos los detalles
Belén Esteban se llevó el susto de su vida cuando en su programa, en Sálvame, se cayó intentando hacer una prueba tipo las que hacen en Supervivientes. Una caída aparentemente tonta que le ha cambiado la vida. Un instante que ha terminado con muchos de sus planes más inmediatos.
Después de aislarse, ahora que ya ha vuelto a casa tras pasar por quirófano, empieza a retomar la relación con el exterior y no ha dudado en entrar en directo en su programa para contar cómo se encuentra.
“Ahora más animada, un poquito más. Me emociono porque lo primero que quiero es dar las gracias a todos mis compañeros, a todos, no hay ni uno que no me haya escrito. Yo no he contestado y me seguían escribiendo”, empezaba diciendo sobre lo agradecida que está por todo el cariño que ha recibido desde el accidente.
“No os imagináis el cariño de la gente y me emociono porque he pasado días malos y ahora poquito a poco”, aseguraba llorando desde su casa.
Parte de salud
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La caída no ha sido una tontería. “No me he hecho una fractura, me he hecho un fracturón, me he jorobado el pie Jorge. He estado en muy buenas manos. Me han puesto 20 tornillos y dos placas y yo soy diabética, no ha sido fácil y no lo estoy pasando bien”, relataba sobre lo que está pasando.
En todo este tiempo ha tenido que lidiar, además, con el acoso de la prensa con fotógrafos constantemente persiguiéndola. “Salgo al porche con Miguel y hay gente que me tira fotos. Que yo sé que no las pueden publicar, pero ahora me gustaría tener un poco de tranquilidad”, pedía.
En cuanto a su vuelta a la normalidad, todavía queda. “He ido al médico y no puedo apoyar el pie entre tres y ocho semanas y necesito rehabilitación. Me he roto la tibia, el peroné y ha habido desplazamientos”, contaba. Kiko Hernández preguntaba si estaría lista para las campanadas: “Para las campanadas yo creo que sí”.
Una de las cosas que más le está costando, aparte de lidiar con las incomodidades y dolores de una fractura como esta, es la falta de paciencia para quedarse en casa sin hacer nada.
“Lo que no tengo es paciencia y con esto se necesita mucha paciencia y yo no la tengo. Mi marido a mi lado, mi familia, mis amigos, pero, sobre todo, teniendo a Miguel a mi lado. Ahora ya empieza a trabajar. Quiero dar las gracias a todos sus compañeros porque ha tenido que cambiar turnos para estar conmigo y no se ha separado de mí día y noche”, contaba sin poder evitar las lágrimas.
El mundo se para
“Se me ha parado la vida tres meses y tenía muchas cosas. Soy una tía muy activa y verme así es… hay cosas peores, pero también hay cosas mejores. Todo el mundo, ‘paciencia, paciencia’, estoy harta de que me digan paciencia porque yo no la tengo”, aseguraba.
Pero ha demostrado que no ha perdido su sentido del humor ni sus ganas de comentar la actualidad y no ha dudado en hablar de Supervivientes, la boda de Carmen Borrego o la incorporación de Pipi Estrada al equipo de colaboradores. Eso sí, se va perder la Fashion Week.
Desde aquí le mandamos nuestro cariño y no le pedimos paciencia, sino que mantenga esa alegría que la caracteriza.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...