Los momentos más locos de Marta Peñate en soledad en "Supervivientes"
La canaria gusta mucho entre los seguidores del concurso de Telecinco
Marta Peñate es una de las concursantes de Supervivientes que más gusta a la audiencia. Algunos han cambiado su opinión viendo su participación en el programa y si antes no podían con ella, ahora son fans.
Hace unos días, el público no podía entender por qué ella era expulsada en vez de Kiko Matamoros. Hubo una pequeña revolución y en redes sociales muchos anunciaban un acto de repulsa al programa que llevarían a cabo con un "gran apagón".
Tras la definitiva expulsión de Desy Rodríguez, que tampoco entendieron los seguidores del programa, por ser uno de los personajes más admirados, Peñate ha estado muy sola en Playa Paraíso. Desde ayer la acompaña Tania Medina, con la que no se lleva precisamente bien. Seguro que nos dejan imágenes para la posteridad.
Precisamente, Peñate ha protagonizado momentos muy locos en sus días de soledad en Playa Paraíso. La concursante se ha aburrido tanto que ha hablado con todo tipo de animales que rondaban por la isla. Uno de los momentos más divertidos que nos ha regalado ha sido su conversación con una iguana.
¿Qué? ¿A ti qué te pasa? ¿Quién te ha invitado al banquete? ¿En serio? Estoy flipando tío, me han dejado aquí en la mierda absoluta…En mi vida pensé que me iba a encontrar con esto", ha gritado la concursante al encontrarse con el reptil.
"Tiene más hambre que yo colega. No desprecies la comida que te doy. Eso, recógela. Loca no, loquísima voy a salir de aquí. Qué asco colega", le decía Peñate indignada al animal.
"No sé si me hace más caso Desy o las iguanas. Creo que ni Desy ni las iguanas me tienen respeto. Desy al menos es una oreja, alguien a quien le puedo contar cosas, comerle la bola, no te contesta, pero por lo menos le hablo", explicaba Marta con gesto de pena y desesperación.
"Después de hablar con una piedra que se llama Desy y luego con iguanas lo próximo va a ser marcarme un Antonio Tejado, caerme de algún palo que vea por aquí y decir que estoy lesionada e irme para España".
La canaria ha exclamado también: "Yo he venido aquí a que me aguanten, no a aguantarme a mí misma".
Los comentarios a estas declaraciones muestran como incluso a los que la canaria no les gustaba demasiado, han acabado sucumbiendo a su particular locura”.