Renfe cambia sus políticas de reserva para evitar abusos sobre el abono gratuito

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Renfe no va a dejar que se abuse del abono gratuito, o al menos esa es su intención. La compañía de trenes pública cambió su política el pasado 16 de septiembre para, tal y como indica El País, tratar de hacer frente a las "reservas fantasma" que algunos usuarios estaban llevando a cabo en el servicio de media distancia para alcanzar el mínimo de 16 viajes exigido por el Gobierno para beneficiarse del abono gratuito.

Según ha recogido este medio, Renfe habría detectado que algunos de los más de 1 millón de sus clientes que habían solicitado el abono gratuito de Cercanías y Media Distancia, estaban abusando de las reservas de Media Distancia desde que el pasado 1 de septiembre este ticket para viajar sin pagar entró en vigor. De esta manera, se estaban reservando plazas para moverse en el transporte público de Renfe en varias ocasiones durante el mismo día o la misma semana, pero no se estaban ocupando los asientos, y como consecuencia, los trenes iban medio vacíos pese a tener todos los billetes vendidos.

Renfe ha bautizado a esta práctica como "reservas fantasma" y se ha propuesto combatirla de raíz. Para ello ha cambiado sus políticas para hacer reservas en su página web y oficinas, y desde ahora, sus clientes solo podrán adquirir billetes para cuatro viajes diarios en trenes de Media Distancia y únicamente podrán cerrar la vuelta cuando se haya realizado el viaje de ida.

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Con estas dos medidas la compañía pretende preservar los derechos de quienes, por ejemplo, se van a comer a casa y regresan al trabajo después, realizando cuatro trayectos diarios, a la vez que ataja la problemática que durante los últimos días ha provocado serias dificultades para los usuarios de este servicio de Castilla-La Mancha y Galicia.

"Se trata de garantizar el buen uso de los abonos gratuitos para viajeros recurrentes y de que se puedan beneficiar de la medida el mayor número de personas posibles", han señalado fuentes de Renfe al medio de Prisa, para después recalcar que la compañía ha monitorizado desde el pasado 1 de septiembre, cuando entraron en vigor, el funcionamiento de estos abonos precisamente por ello se ha podido detectar este error que daba pie al abuso y corregirlo.

Una fianza de 20 euros

El abuso que estaban llevando a cabo algunos usuarios de trenes de media distancia de Renfe consistía en realizar reservas que después no se utilizaban con la intención de alcanzar los 16 viajes en este medio de trasporte en un plazo de entre el 1 de septiembre y el 31 de diciembre que le Gobierno exige para poder beneficiarse del abono gratuito.

Todos aquellos viajeros que lo solicitasen pero que no cumplan con este requisito cuando finalice el año, perderán la fianza que se deposita antes de recibirlo que está valorada en 20 euros, mientras quienes sí hayan realizado 16 trayectos o más, la recibirán de vuelta de forma automática si la pagaron con tarjeta u online o podrán solicitarla en los mostradores de las estaciones de Renfe si la abonaron en metálico.