La última expulsada de ‘MaterChef Celebrity’ era una de las favoritas para ganar
Ya solo quedan cuatro cocursantes para vivir la gran final
La semana que viene sabremos el nombre del ganador de la séptima edición de MasterChef Celebrity. Pero, de momento, conocemos el nombre de la concursante que se ha quedado a las puertas de esa final: Isabelle Junot.
La aristócrata neoyorkina era una de las favoritas para muchos de sus compañeros para ganar el concurso, y también para gran parte de la audiencia, pero no ha podido ser y precisamente ha fallado en lo que se suponía que era su fuerte, los postres.
Tenía que hacer correctamente una tarta de David Pallás basada en la creación del chocolatero Amaury Guichon. Un bizcocho húmedo de chocolate gelificado de frambuesas, con una mousse, y terminado con una rosa de chocolate rojo y una cúpula de isomal. Tenía que ser idéntico a la muestra que tenían. Pero ella se saltó algunos pasos de la receta y había diferencias.
María Escoté y Manu Baqueiro no lo habían hecho mucho mejor, pero esas pequeñas diferencias que había respecto a ellos han hecho que la marquesa se convirtiera en la nueva expulsada. "Al principio he dudado y con esas dudas ya me he atrasado un poco", asegura sobre el fallo que había cometido.
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Balance de su concurso
"Estoy en una nube. Seguramente, al salir de aquí, me ponga a llorar al darme cuenta de que no he llegado a la final. Estoy fascinada con todo y feliz de haber pasado por aquí", reconocía al saberse eliminada.
Luego, más tranquila, charlaba con Pepe Rodríguez y reconocía que este concurso había sido como un sueño para ella. El chef bromeaba sobre lo bien que le había venido para aprender a cocinar siendo una recién casada.
“Esto ha sido un poco estrategia mía, pero no en MasterChef ya, si no, en mi vida. Yo recomiendo a todo el mundo en casa, intentar presentarse a MasterChef porque es la clave perfecta. Uno, estás todo el día cocinando, echándole horas y horas y os veis poco y os echáis de menos. Y dos, aprendes muchísimo. Aprendes mucho de ti misma, aprendes a superarte, a llegar a tus límites, y por eso digo, wow”, admitía.
No las tenía todas consigo antes de aceptar participar en el programa. “A intentar ser yo, desde el primer momento que entré me daba un poco de miedo estar tan expuesta, y me dije, ‘Isabel, esto es una oportunidad una vez en la vida, cógelo y haz lo que puedas’”, confesaba.
Ahora, está contenta por haber asumido el reto. “Me llevo toda esta parte tan impresionante de MasterChef, que me parece un programa increíble. Sois un equipo que nunca me hubiera imaginado. Es la definición de trabajo en equipo, de respeto, de motivación entre todo el mundo. Me voy con un recuerdo increíble y tengo la suerte enorme de haber pasado por aquí”, reconocía.
Sus finalistas
Como siempre hace Pepe, le ha pedido un ganador o ganadora. “Veo dos cosas, a Lorena con su supernena, y podría ser también muy gracioso Manu y Patricia”, explicaba.
Se va una mujer que ha regalado muy buenos momentos. Hemos podido conocerla un poco mejor y nos ha regalado momentos muy emotivos como el de este programa cuando ha recibido una sorpresa familiar.
Abría una caja donde estaba el tocado que su madre llevó en su boda. “La echo un poco de menos…”, decía rompiéndose del todo. “Es lo mejor. Es como la definición de una vikinga porque es rubia y es un todoterreno y no hay nada que le pare. Todas mis amigas, si tienen un problema, no llaman a sus madres, llaman a la mía. Tengo una relación con ella muy de madre e hija, pero a la vez de mejores amigas y nos entendemos y nos contamos absolutamente todo. Mi madre es como mi todo y mi padre es mi debilidad”, aseguraba.
Y era entonces cuando hablaba su madre y dejaba un mensaje que nos hacía entender por qué Isabelle habla a veces de una manera que nos cuesta entenderla.
Sin duda, una gran concursante. Ahora ya solo quedan cuatro concursantes que se disputarán la semifinal la semana que viene.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...