Especial
El momento más lacrimógeno de ‘Pesadilla en El Paraíso’ ha corrido a cargo de Bea Retamal
Ha recibido una inesperada visita que la ha roto del todo, y no ha sido su madre
Esta semana Bea Retamal se enfrenta en duelo a Manuel González en Pesadilla en El Pararíso. Uno de los dos será el próximo expulsado de la granja y eso aumenta los nervios de los concursantes. De ahí que las tensiones hayan aumentado las discusiones esta semana, sobre todo, de Bea.
Por eso, más que nunca, necesitaba el apoyo de uno de los suyos y ha ido a dárselo su abuela. El reencuentro ha sido uno de los momentos más emotivos que hemos visto hasta ahora. Nada más verla junto a Lara Álvarez, Bea se ha echado a llorar y ha corrido a sus brazos.
“No llores, que lloro yo, tronca”, decía la abuela, igual de emocionada, “no quiero que llores, que voy a llorar yo y no quiero llorar en la televisión”.
“Es el mejor regalo que me habéis podido hacer. Estoy super agradecida, es lo mejor que tengo junto a mi madre”, aseguraba Bea. “Que tú estés bien, que yo estoy aquí muy bien, que tengo yo dinamita para todos, que no te preocupes”, le decía a su abuela directamente.
El consejo de la abuela
Y ha sido ella la que le ha dado el mejor consejo, diciéndole lo que tiene que hacer: “Pausándote un poquito, y a lo que te digan, no te metas en sus discusiones. Podrá ser y estarás más contenta tú, mejor, que estarás sin estar nerviosa como estás, que tienes los ojos perdiditos de pena. No te veo alegre y yo quiero verte alegre. ¿Tú sabes lo que me ha dicho Rosita? Que tú no eres esa y que ha quitado la tele por no verte”.
"Esto son momentos, pero en el día también me río un montón y hago un montón de cosas, pero es un poco difícil la situación", replicaba ella.
Lara quería saber qué era lo más difícil de lo que está viviendo y ella lo tiene claro: “Es que venimos Dani y yo y al final lo que más me afecta es la relación con Dani”.
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Reconocía que seguía en su línea de “a lo que no debo es lo que hago”, decía sobre su recaída con Dani. “Amigo y punto”, le aconsejaba su abuela, “y jajaja si puede ser, y si no, a punto y coma, porque estás sufriendo y él también, pero a mí me interesas tú”.
“Es que aquí no he podido evitar caer en la tentación otra vez”, confesaba Bea. “Me encanta la experiencia, me quiero quedar, me lo paso muy bien, ordeño y todo y yo encantada, y si no, no pasa nada. Tú tranquila, yo, aquí, a gusto, y si no, que me des unos pucheros y unos arroces al horno”, intentaba tranquilizar a su abuela.
Momento de arrepentirse
Lara contaba que había preguntado a doña Carmen si lo había hecho todo bien su nieta y había sido sincera asegurando que no. “Yo he tenido aquí formas muy malas. De hecho, creo que siempre me considera una persona alegre y aquí estoy de todo menos alegre. Estoy sacando lo peor de mí, creo que es un error y que a muchos de mis compañeros les debería pedir perdón y no se me caen los anillos por pedir perdón y, de hecho, me siento mal si no lo hago. No pongo la excusa de la situación difícil que tengo y si tuviese que pedir perdón a alguien de nuevo, lo haría”, reconocía.
Llegó el momento de despedirse y seguir conviviendo en la granja. Y si echamos un vistazo a twitter, puede que esta semana sea la última, porque tiene a mucha gente en contra. Hay gente que la defiende y que estaría encantada de ver las caras de todo el mundo si se salvase, pero una gran mayoría están en el otro bando.
El miércoles veremos si continua en la granja o sale definitivamente.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...