Especial
‘Umbrella’: el temazo de Rihanna que pudo haber sido de Britney Spears
Los compositores de la canción no pensaron en la de Barbados como la primera opción
Una artista como Rihanna no podía prescindir de uno de los grandes éxitos de su carrera en su actuación en la SuperBowl. A pesar de que ya tiene 16 años, Umbrella sigue siendo un tema clave en su trayectoria, y se ha convertido en un clásico del pop. Es uno de los grandes hits que contenía su disco Good Girl Gone Bad, y supuso la entrada de la artista de Barbados en la lista de las estrellas con mayúsculas de la música.
A pesar de que la cantante ya tenía dos discos en el mercado y éxitos como SOS, fue con este álbum lanzado en 2007 cuando su carrera despuntó de forma espectacular. Sus cifras de escucha crecieron de forma exponencial y tuvo un enorme impacto en todo el mundo. Y en este recorrido, Umbrella tuvo una importancia fundamental.
La canción llegó como un soplo de aire fresco, cargada de metáforas referidas a la lluvia como las adversidades de la vida, y con el paraguas como ejemplo de la protección que aporta el amor. A eso hay que sumar el videoclip, uno de los más reconocibles de la época, con una influencia muy clara de Singing in the rain.
Para este tercer disco, Rihanna necesitaba un tema especialmente potente. Ahí es donde entraron los tres compositores que la firman. Christopher 'Tricky'Stewart , Terius 'The Dream Nash, y el productor musical Kuk Harrell. El primero de ellos ya tenía un nombre creado dentro de la industria desde mediados de los años 90, y su talento figuraba en un hit anterior que resultó ser todo un éxito: Me Against The Music de Britney Spears con Madonna.
La canción se creó en muy poco tiempo gracias a la colaboración de estos tres compositores. El próximo paso para ellos consistía en ofrecérselo a una artista porque, a decir verdad, Rihanna no fue la primera opción. Lo que querían era una voz femenina de primera categoría que convirtiera Umbrella en un éxito a nivel internacional. La primera cantante a la que se le ofreció este tema fue Britney Spears, con la idea de que la princesa del pop lo incluyera en su quinto disco, Blackout, en 2007.
La discográfica de Britney en ese momento lo descartó de lleno afirmando que ya tenían bastante material para introducir en el que sería su nuevo disco. Los compositores planearon entonces un segundo nombre, esta vez más vinculado al soul y al hi-hop: Mary J. Blige. También lo rechazó, reconociendo que no era un estilo de música con el que se encontrara cómoda, y porque tenía una agenda a rebosar de compromisos.
Siguieron con la búsqueda de su artista ideal y la canción llegó a manos de un directivo de Def Jam Records. Este se la enseñó a Rihanna y ella mostró su deseo de grabarla lo antes posible. Los compositores se mostraron al principio un poco reacios de que fuera ella la estrella de este éxito potencial, aunque finalmente, la presión del círculo de la artista consiguió lo que buscaba. Jay-Z, mentor de la cantante y marido de Beyoncé, fue uno de los artífices de ello, y es el que aparece haciendo el rap del inicio de la canción.
Daniel Garrán
Jefe de producto de LOS40 Classic