José Luis Gil reaparece muy mejorado tras haber sufrido un ictus

El pasado mes de noviembre se cumplía un año desde que José Luis Gil, presente en el imaginario colectivo de todos los españoles por interpretar a Juan Cuesta en Aquí no hay quien viva y a Enrique Pastor en La que se avecina, se alejase de los focos y las cámaras de televisión tras sufrir un infarto cerebral.

La noticia del ictus del actor conmocionó a cientos de compañeros de profesión, incluidos sus compañeros de reparto en la ficción de Telecinco, que con el paso de los meses se han ido interesando por los avances en su estado de salud y conociendo sus mejoras a través de las publicaciones de su hija Irene Gil, un apoyo fundamental en la vida de su padre y encargada de transmitir a través de las redes sociales los pequeños progresos del artista.

Hace exactamente un mes, su hija le dedicaba a través de Instagram una emotiva carta en la que recordaba las veces en las que como madre e hija se había sentido cuidada por sus padres, momentos que ahora le hacían pensar en devolver el favor: "Ahora, son ellos los que necesitan apoyo y que les echen una mano. Aquí estamos, nos hemos venido a hacer lo que tantas veces ellos han hecho por nosotros" escribía.

"Cada día un poco mejor"

Este fin de semana hacía uso de nuevo de sus redes para actualizar de nuevo el estado de salud de José Luis Gil, al que se le podía ver en una fotografía paseando de la mano de su hija por el centro de Madrid con el siguiente mensaje como pie de foto: "Cada día un poco más lejos, cada día un poco mejor".

Entre los comentarios, Cristina Castaño ha querido volver a mostrar su apoyo incondicional al actor y su familia compartiendo unos corazones, mientras que cientos de fans y seguidores del actor también han querido mandar sus propios mensajes de ánimo en un momento en el que poco a poco se va viendo la luz al final del túnel. El regreso de José Luis Gil a la televisión todavía se desconoce (y está en su mano tomar la decisión de volver o no cuando su salud se lo permita). Desde los40, en cualquier caso, mandamos toda la fuerza y ánimos del mundo para que los días sigan siendo cada vez mejores. Lo peor ya ha pasado.