#YoApoyoLaCasaComún: la campaña para exigir un compromiso medioambiental a los políticos
Las principales organizaciones ecologistas presentan una iniciativa que invita a posicionarse de cara a las próximas elecciones.
El planeta se la juega, también en las elecciones. / Getty Images.
Cuidar el planeta es tarea de todos. De los ciudadanos a título individual, pero también –y muy especialmente– de las administraciones públicas. Por eso, y de cara a la cita con las urnas del próximo mes de mayo, los candidatos tanto municipales como autonómicos deben comprometerse a hacer todo lo posible para convertir cada ciudad y cada territorio en lugares más sostenibles.
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Ese es el espíritu de la campaña #YoApoyoLaCasaComún, que ha sido presentada este jueves en Madrid. Tras ella están las cinco organizaciones ecologistas más importantes de nuestro país: Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF. Y su mensaje es claro: nuestros representantes políticos deben posicionarse de manera clara e inequívoca con el cuidado de las personas y el medio ambiente.
Tal y como recuerdan los ecologistas, “la Tierra es nuestra casa común. Es el espacio de coexistencia, el territorio donde se convive, se trabaja, se disfruta o se sueña. La humanidad depende de la casa común para la subsistencia y, por ello, preocupa tanto la degradación de la naturaleza como la enorme vulnerabilidad social existente”.
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Hay mucho por hacer. Según explican los impulsores de la campaña, “se espera que las candidaturas den respuesta a los problemas del día a día: el trabajo, las olas de calor, el transporte, el acceso a los servicios públicos, el abandono rural y la falta de oportunidades que padece, la alimentación o las desigualdades sociales. La aspiración es que las administraciones públicas ejerzan políticas reales que aborden estas preocupaciones, yendo más lejos que los simples tópicos electorales”.
8 casos concretos
Para ir más allá de esos tópicos, las cinco organizaciones ecologistas han identificado ocho casos que muestran nulo interés y cuidado por la salud del planeta por parte de las administraciones: unión de estaciones de esquí en el Pirineo Aragonés, la derogación de Madrid Central, la contaminación del Mar Menor, unas Tablas de Daimiel al borde del colapso hídrico, las toxinas emitidas por la incineradora de Valdemingómez, la regasificadora de El Musel, la desprotección del archipiélago Chinijo y la implantación de renovables sin planificación ni zonificación vinculante en el territorio.
Todos ellos son, según los creadores de #YoApoyoLaCasaComún, “casos paradigmáticos de territorios diferentes vinculados a tópicos y promesas que se escucharán muchas veces en esta campaña electoral. Frente a ellos, las organizaciones ecologistas presentan propuestas que servirían para revertir de forma real el cuidado de las personas y del medio ambiente y eliminar la vulnerabilidad social”.
“El cuidado de La Tierra va más allá de lo que pasa en un municipio o en una comunidad autónoma, pero empieza a construirse ahí, sobre el terreno. De hecho, en el Estado español las comunidades autónomas y los ayuntamientos tienen gran parte de las competencias sobre cuestiones tan importantes como la gestión de los residuos, del agua, de los espacios y especies naturales, de la calidad de la alimentación y del transporte y, con ello, una muy buena parte de los asuntos que pueden contribuir a atajar la crisis ecológica y social que vivimos”.
