El debut de Hotel Flamingo, Discos y vinilos, fue tedioso y se alargó en el tiempo. Auto producirse y gestionar absolutamente todos los aspectos de tu propia carrera puede resultar agotador y Andrea Guaschy Rosco han acabado exhaustos. Pero lejos de tirar la toalla, han decidido abrir nueva etapa.
Una etapa en la que quieren centrarse en lo artístico y delegar en otros profesionales distintos aspectos de su carrera. Y la carta de presentación de este nuevo comienzo es Quedan balas, un tema que habla de esas ganas de seguir intentándolo y que deja claro que se viene rock más contundente, el que les hace disfrutar sobre el escenario.
Y el tema llega con una portada impactante. Hemos hablado de ella, de lo que esperan, de su luna de miel o su viaje a Ibiza y de lo que la naturaleza representa para ellos ahora, entre otras cosas.
Quedan balas, suena a que intentáis convenceros de que esto merece la pena.
Andrea Guasch: Justo. Llegan momentos que, al final, al hacerlo todo nosotros, hay mucho peso encima de nuestros hombros. Y haber sacado un disco que llevaba grabado tres años, al final, no te emocionas igual que si sacas single a single. Ahora que ya hemos sacado el disco y nos hemos quitado un peso de encima porque ya está…
Rosco: …podemos hacer canciones nuevas. Mencionamos, ‘déjate llevar que el viento sopla a tu favor’, justo que ahora está en emisión Tu cara me suena, que hay oportunidades buenas, es como que vamos a seguir con esto que justo ahora merece la pena con todo lo que hemos aprendido del primer disco. Se lo hemos mandado a amigos de confianza y les toca porque no es un mensaje super concreto, en tu día a día, te puedes convencer de que te quedan balas.
Del camino hasta aquí, ¿qué ha sido lo mejor y lo peor?
Andrea: Bueno hay muchísimo porque nos hemos conocido por la música, nos hemos enamorado con la música y, a día de hoy, nos emocionamos con la música en la mayoría de cosas que nos pasan y lo peor, que también hay momentos de frustración, de inseguridades.
Rosco: Lo mejor que me ha dado la música son las personas. Hemos conocido gente maravillosa por el camino que nos ha intentado ayudar. Ha habido veces que grabando videoclips veías actores, actrices, directores como Abril Zamora que lo han dado todo por nosotros. Ha habido veces que se me han saltado las lágrimas porque esta gente nos está ayudando. Y lo peor que me llevo es que ha habido momentos en los que ha podido afectar momentos personales con Andrea porque es un trabajo que te llevas a casa y ha habido momentos en los que nos hemos preguntado si merece la pena si nos queremos un montón.
Teníais claro que la portada iba a impactar, ¿no?
Andrea: Queríamos que fuera impactante, que chocara hacia bien con todo lo que hemos hecho anteriormente que era mucho más country, más relax, y teníamos ganas de que fuera algo más rock and roll, que nos lo pasáramos mejor en el escenario cuando hiciéramos conciertos. El título es Quedan balas, que es más fuerte que Deja que me lance, que es esperanzador, pero no tan directo y queríamos que la portada fuera directa.
Rosco: Pero con ese toque de amor, que tiene el corazón.
Andrea: Nosotros no somos macarras. Vamos hacia el rock porque nos gusta, pero no vamos a ser hardcore.
Es el comienzo, como decís, de una nueva etapa, ¿hacia dónde va?
Rosco: Más hacia el rock. Antes teníamos un poco de miedo de endurecer la producción de las canciones y mira que en Discos y vinilos hay guitarras eléctricas, pero ahora nos hemos dado cuenta de que nos excita tocar rock. Cuando estamos haciendo Quedan balas ya hay algo que nos mueve y creo que nos tenemos que dejar llevar por esas sensaciones y vamos a ir hacia el rock.
La última vez que hablamos me decíais que queríais encontrar el tiempo para poneros a componer, ¿lo habéis encontrado solo para esta canción o vienen más?
Andrea: De momento para una canción que, además, fue bastante rápida. La empezó él, le vino la musa y en 20 minutos me enseña eso y me eché a llorar, me emocioné mucho y luego seguimos los dos. Tenemos una canción y hay varios bocetos, pero queremos centrarnos en una cada momento. Emocionarnos con esa canción, lanzarla, cuidarla y luego pasar a la siguiente.
Cerrasteis etapa con Lleva tu nombre, con vídeo dirigido por Abril Zamora (guionista de series como Élite o Las señoras del HAMPA), mucha emoción en esas imágenes, ¿no?
Andrea: Es uno de esos vídeos de echarnos a llorar de la emoción de ver a tanta gente implicada en un proyecto. Abril, Sandra Cervera, Teresa Riott… es el primer vídeo en el que no somos protagonistas. Siempre era como buscarlo todo, el espacio, el cámara, ponte guapa, actúa, canta… y en este hemos disfrutado de la gente haciendo algo por nosotros y ha sido muy emocionante ver cómo se ponían en la piel de esos personajes inventados por nosotros.
Rosco: Y Abril… admiramos mucho a Abril. Ella había trabajado con ella en la serie Todo lo otro y la habíamos visto en un set grande de HBO y, de pronto, estaba en un proyecto mucho más modesto, pero con la misma entrega y siempre mirando por nosotros.
Nos habéis acostumbrado a una entrega muy personal en vuestros videoclips, ¿se puede mantener ese ritmo?
Andrea: Para este single hemos querido hacerlo más relax, nos hemos grabado un vídeo en acústico. Tenemos la versión en eléctrico con un vídeo lyric que es muy bonito.
Rosco: Es super bonito, es el primero que hacemos. Los videoclips a ella le gustan más, pero a mí me agotan. Tiene varios detallitos.
Andrea: Sí, de pronto sale un Paul McCartney, de pronto sale una fotógrafa que a mí me gusta mucho. Hay varios toques. Y luego hicimos la versión en acústico, que es así como se hizo la canción. La hemos tocado en varios conciertos y a la gente le gusta también la versión acústica. Queríamos que fuera fácil y sencillo, que no nos costara mentalmente mucho esfuerzo.
Os he visto con Carlos Tarque en Ibiza, ¿tramando algo o solo disfrutando del verano?
Andrea: Música por diversión. Lleva toda la vida en esto y nos da buenos consejos como amigo, pero nada más allá de momento.
Rosco: Ojalá algún día, pero ya estar en el velero tocando… tengo heridas en los dedos de no parar de tocar durante cinco horas la guitarra.
Andrea: Algún vino caía y las púas de pronto, desaparecían, no sé por qué, los mecheros y las púas desaparecían.
¿Mucha fiesta por Ibiza?
Andrea: No, estuvimos en el barco. Soy cero rockera. Fiesta como tal, y menos en Ibiza, tengo que reconocer que no, no soy muy de ‘chundachunda’ y esas cosas. Me gusta más tomarme un vino con amigos, música, buena amiga.
Rosco: Fue eso y luego nos presentó a muchos amigos suyos de Denia, también amantes de la música. Son los planes que nos gustan. Prefiero eso mil veces a una discoteca.
Para fiesta la que os habéis marcado en Maldivas. Luna de miel diez meses después de la boda, os ha costado.
Andrea: Por fin llegar, tuvimos que forzar porque salían cosas.
Rosco: Nos cambió la vida ese viaje. Encontramos un refugio en el buceo espectacular. De hecho, fuimos con Tarque a Cabo de Palos, en Murcia. Y estamos mirando sitios en península para quitarnos el gusanillo, pero queremos volver porque lo que hemos sentido estando ahí debajo de mantas, tiburones… parece una locura, pero lo que realmente sientes es paz. Yo que soy u na persona que le da muchas vueltas a todo en la cabeza me he dado cuenta de que la mejor meditación es bajar ahí abajo y controlar la respiración.
Andrea: No puedes mirar el móvil, no puedes hablar, es todo por señas. Es increíble que te entiendes con todo el mundo, aunque sea chino. Es un lenguaje universal y mola un montón. Te sientes parte como de otro universo.
Rosco: Si estás ahí y respetas su hábitat, te respetan.
