Especial
La Antártida está reverdeciendo… y no es una buena noticia
Un estudio demuestra que el cambio climático está siendo mucho más acelerado en este remoto lugar del mundo.
Dicen de ella que es la última frontera. El continente helado, la Antártida, es un lugar excepcional por infinidad de motivos. Ubicada casi en su totalidad al sur del círculo polar antártico, cuenta con algo más de 14 millones de kilómetros cuadrados, de los cuales el 98% están cubiertos de hielo. Pero eso parece estar cambiando poco a poco.
La península antártica, el brazo de tierra que se extiende en dirección al sur de Chile y Argentina, está reverdeciendo a gran velocidad. Según acaba de demostrar un estudio realizado por las universidades británicas de Exeter y Hertfordshire y el British Antarctic Surve, y publicado en la revista científica 'Nature Geoscience', la cubierta vegetal de esta zona se ha multiplicado por más de diez en las últimas cuatro décadas.
En 1986 apenas había un kilómetro cuadrado de superficie vegetal: ahora hay 12
El estudio toma como inicio el año 1986, cuando apenas había un kilómetro cuadrado de superficie vegetal. En 2021, ese área se había disparado hasta los 12 kilómetros cuadrados. Además, ese incremento de las zonas verdes va cada vez más rápido: en los últimos años (2016-2021) se aceleró en más del 30% en relación con el período de estudio completo (1986-2021), expandiéndose en más de 400.000 m² por año en este período.
"Las plantas que encontramos en la península Antártica, principalmente musgos, crecen en quizás las condiciones más duras de la Tierra", ha explicado en un comunicado el Dr. Thomas Roland, de la Universidad de Exeter. "El paisaje sigue estando dominado casi en su totalidad por nieve, hielo y rocas, con sólo una pequeña fracción colonizada por vida vegetal. Pero esa pequeña fracción ha crecido drásticamente, lo que demuestra que incluso esta vasta y aislada 'naturaleza salvaje' se está viendo afectada por el cambio climático antropogénico".
Un fenómeno “impactante”
Según ha añadido Olly Bartlett, investigador de la Universidad de Hertfordshire y otro de los autores, "esperábamos ver algún aumento en el área general de vegetación en la península antártica, pero la magnitud de este cambio y el ritmo al que está ocurriendo son impactantes".
En el futuro podríamos ver cambios fundamentales en la biología y el paisaje
De cara al futuro, esta nueva situación tendrá consecuencias imprevisibles. "La sensibilidad de la vegetación de la Península Antártica al cambio climático es ahora evidente y, en el futuro, con el calentamiento antropogénico, podríamos ver cambios fundamentales en la biología y el paisaje de esta región icónica y vulnerable", ha explicado el Dr. Roland.
Se da la circunstancia de que las condiciones extremas de la Antártida habían servido a algunas voces para cuestionar el calentamiento global. "Hay pruebas de que el hielo marino de la Antártida ha aumentado en los últimos 40 años. Sin embargo, se ha demostrado que la pérdida general de hielo en ambos polos ha aumentado drásticamente en los últimos años, y la capa de hielo de la Antártida occidental es particularmente vulnerable", ha apuntado Bartlett.
"Los efectos del cambio climático son complejos y pueden manifestarse de maneras sorprendentes, a veces contraintuitivas, pero ya no hay duda de que los cambios climáticos y ambientales generalizados que estamos viendo son de origen antropogénico. Nuestro estudio confirma que el paisaje y la ecología de una de las últimas regiones salvajes que quedan en el planeta, la península antártica, está cambiando rápidamente".