Miley Cyrus revela de quién fue idea su actuación más polémica en 2009, antes de 'Bangerz': "¡Estaba en tacones! ¿Qué esperaban?"

Miley Cyrus podría tener la misma carrera musical sin las polémicas que le han acompañado siempre, aunque no sería lo mismo. Su último éxito global viene adornado de un trasfondo de superación de una relación larga y tóxica —su romance y posterior divorcio con Liam Hemsworth—, y la década pop de 2010 estuvo marcada por su era más controvertida hasta la fecha, la del disco Bangerz.

Sin embargo, la joven parecía apuntar maneras desde que empezaba a despuntar con su propia carrera más allá de la peluca rubia de Hannah Montana, o al menos eso enalteció la sociedad estadounidense. Ya en 2009, cuatro años antes de que la artista empezara a perrear por escenarios de medio mundo y contrastando con su personalidad adquirida de chica Disney, protagonizó un momentazo que también hizo a cierto sector de la población llevarse las manos a la cabeza.

Fue durante la gala de los Teen Choice Awards de 2009, pocos días después del lanzamiento de uno de los hits que marcó su prácticamente recién estrenada carrera alejada de la factoría Disney. Todo estaba preparado para Party in the U.S.A., con una escenografía muy parecida al videoclip —que saldría más de un mes después—, pero con un detalle que conmocionó a mucha gente:

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Pese a que el arranque del número no tenía nada reseñable más allá de una ambientación con caravanas y elementos aparentemente típicos de lo estadounidense, el último tramo de la canción tenía a Miley subida a un carrito de helados con lo que muchos pensaron que era una barra de pole dance. Al día siguiente vinieron las críticas.

Pero ¿de quién fue idea? No es ningún secreto, pues Miley ya ha hablado de ello en varias ocasiones, pero ha sido en el formato Billions Club en el que ha vuelto al tema en una conversación con su propia hermana. "Hubo un poco de controversia porque había una barra involucrada y eras muy joven", la explica Brandi Cyrus, a lo que Miley interrumpe con "era un carrito de helado".

Cuando le pregunta por cómo se sintió por la reacción del público, que creía que Miley se estaba distanciando de su faceta infantil, responde primero señalando a una clara culpable: su madre. "Esto no te va a sorprender. ¿Sabes de quién fue la idea?", pregunta, a lo que su hermana mayor adivina que fue Tish Cyrus.

"Sí, fue idea de mi madre. Siempre deja que me vengan a mí las culpas. Cuando me metí en problemas al día siguiente, ¿sabes de quién no había ni rastro? Tish Cyrus", comenta entre risas la intérprete de Flowers. Tras ello, le sigue restando importancia dejando claro de lo que más se acuerda de aquella actuación: "Era la primera vez que llevaba un diamante de verdad sobre el escenario. Vosotros recordáis un viejo y pequeño camión de helado, yo recuerdo los diamantes".

La realidad, más cerca de la seguridad que de la polémica

Aunque no se extiende más en el tema, lo cierto es que su madre no dio la idea de la barra por buscar la sexualización que muchos aseguraron ver en la actuación. En otra entrevista que dio en 2023 sobre Used To Be Young, un single con el que hizo retrospección en su carrera y comentó varios momentos de la misma, ahondó en el papel de su madre respecto a esa decisión.

"Mi madre dijo: "Creo que sería muy guay si estuviera en un parque de caravanas, porque es realmente de donde venimos". Así que, aparentemente, era yo bailando sobre un carrito de helados con una barra de stripper", explicaba Cyrus. "Pero no era una barra de stripper, en realidad era por... ¡Estabilidad! Llevaba tacones, ¿qué esperabais de mí?", continuaba.

Ella misma aseguró que la actuación fue "increíble" —se queja del tono apagado y del sombrero que llevó, eso sí—, aunque no todas las reacciones fueran negativas. También vio artículo de una revista que también le enseñan con el titular "¿Se está convirtiendo Miley en la próxima Britney?" y lo comentó: "¡Eso espero! Si Dios es bueno... y sabemos que ella lo es".