Sofía Cristo vuelve a ‘Secret Story’ para hablar sobre su agresión a Frigenti: “Es una lección de vida”

Gran Hermano nos ha dejado a lo largo de sus múltiples ediciones, muchos momentos de gran tensión que han desembocado en expulsiones disciplinarias. Y Secret Story no iba a ser diferente, aunque puede que tal vez no se esperar tran pronto. Carlos Sobera tuvo que vivir uno de sus peores programas en la última entrega de Cuenta Atrás, cuando Sandra Pica y Miguel Frigenti se sumieron en una gran discusión. Lo peor no fue eso sino la intervención de Sofía Cristo harta de lo que estaba sucediendo. Acabó perdiendo los paples y enfrentándose al colaborador de Sálvame hasta el punto de que acabó agrediéndole en directo después de varios gritos e insultos.

La organización del programa enseguida ordenó la expulsión de la concursante esa misma noche, algo que ella misma predijo desde el momento en el que le puso la mano encima a su compañero. Apenas salió su marcha de la casa, pero el presentador le dejó claro que tendría la oportunidad de volver a plató 48 horas después para explicarse.

Una vez comenzado el programa, Sofía Cristo acudía a su cita con Jorge Javier Vázquez para explicar todo. Aunque terminó por cumplir lo esperado por todos y dedicó su espacio a una larga e intensa disculpa:

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"Hoy estoy para escuchar y para pedir perdón a todo el mundo, sobre todo a la familia de Miguel", comenzaba diciendo en su entrada al programa. Algo que le valió una lluvia de aplausos, aunque eso no le paró ahí. Siguió calificando su comportamiento de vergonzoso e injustificable, algo que distaba mucho de su reacción tras lo acontecido en el momento de la agresión -gritó "corre a decir que me echen, capullo" mientras Frigenti abandonaba la sala común-.

Una disculpa directa, pero nada dulce

"Pido disculpas a la audiencia, a todos y sobre todo a la familia de Miguel. Incluso a mí misma", continuaba. Llegó a ir directamente a Nua, novio de Frigenti, para dejarle claro lo que pasó. Él, por su parte y hablando por su familia, aseguró que se entendía todo y que no le darían mayor importancia porque entendían la situación de las condiciones del reality. "Esto es una lección de vida para pulir ciertas cosas y en sacar mi mejor versión", dictaminó de la forma más reflexiva posible.

Miguel, por su parte, pasó las horas posteriores a la marcha de su compañera confesándose ante las cámaras de que le dolían más los insultos que las agresiones. Y aunque dijo que no le apetecía ver a Sofía a su salida del programa, acabó conectando por videollamada desde la casa para cruzar alguna que otra palabra. Y fueron de lo más correctas.

"Lo siento de corazón porque creo que se me fue de las manos", empezó Cristo, para luego seguir con un demoledor "pero tampoco voy a justificar tus agresiones verbales hacia la casa". Aunque el colaborador de Sálvame no estaba nada de acuerdo con la situación, prefirió despedirse de la DJ dejando en el aire si la vida les volvería a juntar. Jorge Javier, por su parte, lo dejó claro: algún día se sentarán a hablar y solucionarán todas sus diferencia.