Elon Musk quiere despedir a la mitad de la plantilla de Twitter y cobrar por las cuentas verificadas

Elon Musk ha llegado a Twitter dispuesto a arrasar con todas sus políticas. El magnate de los negocios y fundador de Tesla ha conseguido adquirir la red social del pájara azul después de muchísimos titubeos y, nada más ponerse al mando de la misma, ha anunciado grandes cambios tanto en sus políticas de personal como en su modelo de negocio.

El nuevo dueño de Twitter, tal y como recoge la prensa económica de Estados Unidos, ha pedido a los responsables de las distintas divisiones de la red social que identifiquen a sus empleados más valiosos, y por ende, les ha obligado a señalar a aquellos de los que podrían prescindir. Una vez recabada y analizada, Musk planea despedir a prácticamente la mitad de la plantilla, unos 3.700 empleados de los 7.500 que en estos momentos están en nómina, con la intención de abaratar costes ya que la empresa no gana el dinero suficiente como para pagar la deuda de 13.000 millones que acumula.

Este recorte, aunque es masivo, es mucho inferior al que Musk podría haberse planteado. Según informa este jueves El País, el empresario habría llegado a proponer a algunos inversores la posibilidad de despedir al 75% de todos sus empleados, provocando así, una pequeña cascada de salidas que se han ido repitiendo ante el temor de que finalmente el dueño de Space X cumpliese con sus amenazas que, al menos por el momento, se quedarán en eso.

Eso sí, no se puede descartar que Elon Musk continúe con los recortes después de esta primera salida masiva, ya que para Twitter las perspectivas no son buenas. Desde que el magnate se puso al mando la empresa ha visto cómo empresas de la envergadura de General Motors y L'Oréal anuncian que no continuarán con sus pactos publicitarios, algo que podría derivar en la suma de más compañías.

Se acabó el teletrabajo

Además de los recortes de plantilla, Musk también pretende eliminar el régimen de teletrabajo implantado actualmente y obligará, de forma generalizada, a los trabajadores que se queden a acudir a las oficinas de forma presencial.

Aunque no lo ha detallado, es posible que se implante en Twitter un sistema similar al que se ha establecido ya en Tesla, por el que Musk y el resto del equipo directivo solo permiten al resto de trabajadores teletrabajar una vez se hayan cumplido un mínimo de 40 horas en la oficina.

Nuevos ingresos derivados de los usuarios

Ante la caída de los ingresos publicitarios Musk ha anunciado públicamente su intención de empezar a generar ingresos cobrando por algunos servicios "premium" de Twitter que hasta ahora han sido gratuitos. Uno de ellos, el check azul que indica que la cuenta ha sido verificada.

Este icono, muy apreciado por los usuarios más populares de la red social del pájaro, podría llegar a valer hasta ocho dólares al mes, un coste que, según ha tuiteado el empresario, deberán pagar aquellos que ya lo tienen si no quieren perderlo. "Tienes lo que pagas", escribió el nuevo dueño de la herramienta junto a varias respuestas irónicas a aquellos usuarios que consideraban que esta nueva fuente de ingresos no era una buena idea para el funcionamiento de Twitter.