Esther Cañadas se rompe al hablar de la enfermedad que le cambió la vida: "Bastante tuve con no morirme"

La periodista María Casado estuvo este miércoles de estreno con la nueva temporada de Las tres puertas. Con motivo de este regreso, la presentadora recibió a dos invitados de mundos muy distintos; el cantante Omar Montes y la modelo Esther Cañadas.

La famosa top, icono a nivel nacional e internacional durante los 90 y los 2000 que emprendió su carrera a los 14 años, se sentó a charlar con la periodista y terminó abriéndose como nunca lo había hecho sobre la terrible enfermedad crónica que padece y que, como ella misma aseguró, le ha cambiado la vida.

Los motivos por los que renunció a ser modelo

Durante su encuentro en el programa, Casado le preguntó por sus inicios como modelo, su experiencia en ese ambicioso y competitivo mundo y, sobre todo, quiso saber el motivo que la llevó, casi de un día para otro, a dejar esa profesión en la que tanto estaba triunfando.

"Llega un punto en que no has parado y hay demasiadas cosas sucediendo", comenzó explicando Esther Cañadas. Aunque fue en ese momento cuando confesó que en aquellos momentos de renuncia en los que lo dejó todo para centrarse en sí misma, coincidió cuando le dieron una terrible noticia.

Tal y como explicaba la supermodelo de Albacete, por aquel entonces sufría unos terribles dolores por los que le diagnosticaron una "enfermedad inmunológica". Eso, unido a los nivels de estrés por los que se vio forzada a pasar a causa de su trabajo hicieron que sus dolencias se multiplicaran.

Al hablar de este tema y recordar esos días de sufrimiento, Cañadas se vio visiblemente afectada: "Llega un momento en que te levantas y piensas ‘¿Esta es mi vida? ¿De verdad es ir al médico, ir al hospital, tener efectos de todo tipo en el cuerpo…?".

A esos niveles, la exmodelo se vio saturada y en pedazos: "Bastante tenía con no morirme". "Y cuando te dicen que sí, que es crónico… Es complicado", continuaba relatando.

Pese a su situación, Esther Cañadas contó en Las tres puertas que ella nunca se dio por vencida y que incluso se fue hasta Hong Kong para probar la "medicina china". Probo la meditación con monjes en Tailandia y en México, pero nada servía para aliviar su malestar.

Fue entonces cuando decidió desmarcarse de su ritmo de vida como modelo para centrarse en ella y en su familia: "Las prioridades en mi caso no cambiaron, lo que cambia es el tiempo que tienes para tus prioridades".

Ahora, con 45 años, Esther Cañadas ha admitido que sí le gustaría volver a las pasarelas, pero con tranquilidad. Además, mostró en el programa el orgullo de madre que sienta por su única hija, Galia, de ocho años.